Una vez que la dinámica del
Jumbo-Visma se ha enderezado, quizás la mayor amenaza para que
Sepp Kuss se asegure la victoria general en la
Vuelta a España 2023 sea una caída inoportuna. Por ello, el estadounidense se niega a contar sus pollos antes de que hayan salido del cascarón.
La etapa 19 puede haber parecido un día tranquilo y relativamente libre de estrés para el pelotón, pero cuando se está tan cerca de la mayor victoria de tu carrera profesional, nada es fácil. "Normalmente, me siento detrás y llego a meta, pero ahora hay algo más que perder", dijo Kuss a La Vuelta en una entrevista posterior a la etapa. "Los chicos me han ayudado muy bien hoy, siempre hemos estado delante. El ritmo era bueno. A veces es mejor mantener un poco de tensión en las piernas. Siempre ha soplado un viento molesto de costado, así que no ha sido demasiado fácil".
Como ya se ha mencionado, quizás la mayor amenaza para el maillot rojo de Kuss sea una caída. El estadounidense, que se fue al suelo en la penúltima etapa del Tour de Francia, sabe muy bien que estos incidentes inocuos pueden salir muy caros. "Creo que en estas etapas en las que todo es más relajado a lo largo del día, la gente se arriesga y al final se cae, pero nosotros nos mantuvimos fuera de problemas", explica.
Aunque se espera que la 20ª etapa sea un día para la escapada, el perfil de la etapa, similar al de las clásicas, significa que Kuss no puede permitirse el lujo de desconectar. "Mañana habrá muchas subidas. Pero tenemos un equipo muy fuerte y podemos afrontar la etapa de mañana con mucha confianza", afirma. "Va a ser un día muy duro, todo el mundo va a ir a por todas".