Perfil. El 25 de febrero, los ciclistas compiten en la segunda de las clásicas del "Fin de semana de apertura":
Kuurne-Bruselas-Kuurne. Esta carrera, que culmina el fin de semana, es una de las competencias más destacadas de Bélgica y brinda un gran espectáculo cada año.
La carrera belga cuenta con 1.800 metros de desnivel, la mayoría en los dos primeros tercios. Siempre es una carrera muy interesante, en la que abundan los ataques de los especialistas en clásicas en las numerosas subidas y sectores adoquinados que ofrece la carrera.
Pero los 60 kilómetros finales presentan muy pocas dificultades, lo que crea una dinámica interesante entre los atacantes y los equipos de los velocistas que desean remontar. Cada año se promete drama y se entrega en las calles de Kuurne.
Kortrijk - Kuurne, 196,5 kilómetros