"Necesito vengarme": Filippo Ganna aspira a ganar monumentos con INEOS en 2026

En 2026, INEOS Grenadiers afronta una temporada que sirve como reinicio. Más allá del pistoletazo de salida a un nuevo trienio, el equipo británico ha remodelado su cuerpo técnico con incorporaciones de mucho calibre: Geraint Thomas como director de rendimiento, Elia Viviani como director deportivo... Por eso, habrá muchos nombres con ganas de revancha. Uno de ellos es Filippo Ganna.

La última temporada fue una montaña rusa para el italiano. Ganna pasó de quedar 2º en la Milán-San Remo y ser 2º también en la general de la Tirreno Adriático a sufrir caídas y pinchazos en París-Roubaix y Tour de Francia. Por eso, el corredor de INEOS desea convertir sus podios en monumentos en victorias. Volver por la puerta grande.

“En las últimas temporadas he acumulado muchos segundos puestos. Demasiados. Desde mi punto de vista… hay que convertirlos en primeros, en victorias”, declaró Ganna a La Gazzetta dello Sport.

“En el fondo, siento un impulso de revancha”. Razones no le faltan: fue segundo tras Remco Evenepoel en los Juegos Olímpicos y el Mundial 2024; también en el Europeo de este año y en San Remo. Suma tres triunfos en 2025, pero ha rozado tantas victorias grandes en los últimos años que se ha convertido en un tema recurrente para él.

“El próximo año cumpliré 30, pero eso no significa que no pueda dar otro salto adelante. También porque los demás mejoran. Quizá correré un poco menos. Pero cuando compites, es para ganar.” En 2026 no se marcará un calendario modesto para inflar cifras: estará en la Volta ao Algarve, San Remo, Paris-Roubaix y Giro de Italia. Tiene una fórmula ganadora, pero quiere ajustar algunos detalles.

“Más que cambiar, se trata de hacer lo mismo un poco mejor. Especialmente en Sanremo, el Monumento que más cerca he tenido. Ya he demostrado que puedo estar ahí. Una fracción de segundo puede decidir entre éxito y derrota”, explica. “Digamos que Sanremo… la quiero. Está ahí. En Roubaix, tengo que intentar cada oportunidad que se presente. Nunca he encontrado el momento justo, a menudo llegué un poco corto de forma. Quién sabe, quizá en 2026 cambien las cosas”.

La contrarreloj del Europeo fue quizá el golpe más duro para el italiano, midiéndose a un Remco Evenepoel que había regresado de Ruanda unas 24 horas antes de la salida. Además, aunque el viento pudo favorecer al belga, Ganna asegura que firmó números récord sobre la bici, pero quedó lejos del triunfo, a 43 segundos en un trazado mayoritariamente llano de 24 kilómetros.

“La crono del último Europeo en Francia, plata tras Evenepoel. Pues bien, hice números récord que no lograba desde la crono de Valdobbiadene en el Giro de Italia 2020 y, de hecho, he mejorado respecto a aquellos. No bastó para ganar”, admite. “Pero hace falta más para desanimarme”.

Con la mirada puesta en los Juegos Olímpicos de 2028, Ganna también piensa en la pista: “He participado tres veces, gané tres medallas, pero el espíritu olímpico dentro de mí sigue muy vivo. No es casualidad que quiera llegar a la cima en 2028 en Los Ángeles, porque mi padre Marco también estuvo allí en sus mejores años”.

“Continuar la dinastía, en cierto modo, me motiva. Sería una gran plataforma para concluir (los Juegos de 2032), un poco como hizo Fabian Cancellara en Río 2016. Un referente. Significa que, para imitarle, tendré que volver a estar en mi mejor versión”.