En un mundo donde
Tadej Pogacar es un ciclista imparable, ¿qué pueden hacer sus rivales para competirle el
Tour de Francia? De camino hacia la temporada 2026, nada ni nadie parece que pueda evitar su quinto título con el que haría historia. La estrella de UAE Team Emirates XRG empataría a Eddy Merckx, Miguel Induráin, Jacques Anquetil y Bernard Hinault. Pero, ¿y si hay una posibilidad?
Aunque desde 2024 el esloveno ha dado un enorme salto de nivel, también ha evidenciado en varias ocasiones que tiene un punto débil. Y eso es a lo que se tienen que agarrar en
Visma - Lease a Bike con
Jonas Vingegaard..., y también en
Movistar Team con su nueva figura de la Grande Boucle,
Cian Uijtdebroeks.
Como se anunció durante la presentación del equipo telefónico para 2026, su fichaje estelar correrá el Tour de Francia 2026 por primera vez en su carrera profesional. Lo hará como líder, y
por ahora con la ayuda de Einer Rubio (si todo va bien). Por lo que prometía antes de su lesión, Uijtdebroeks está llamado a ser uno de los mejores vueltómanos del futuro, y por ello hay que confiar plenamente en él.
Si se echa un vistazo a las actuaciones de Tadej Pogacar, cuando todo va bien no hay ninguna posibilidad de que pierda una carrera. El bicampeón del mundo lanza su ataque demoledor en el momento más oportuno, y nadie puede seguir a su rueda pese a que Vingegaard y Remco Evenepoel lo hayan intentado en múltiples ocasiones a lo largo de las últimas campañas.
Cian Uijtdebroeks será rival de Pogacar en el Tour de Francia 2026 con Movistar Team
Pogacar, su propio mayor enemigo
Pero no siempre es así, y Tadej Pogacar tiene una debilidad que le ha dejado evidenciado en varias ocasiones. Apareció en la pasada Strade Bianche, y también en el Tour de Francia durante 2025, pese a que ganó ambas carreras. También en 2023, y le provocó una lesión en la Lieja-Bastoña-Lieja. Este punto débil no es otro que su facilidad para sufrir caídas.
La agresividad de Pogacar en la carretera suele ser su mayor aliada, pero también le causa momentos de mucha tensión e incluso lesiones. En las carreras mencionadas ocurrió lo siguiente:
- Lieja-Bastoña-Lieja 2023: una caída provocó que se fracturase la muñeca y no llegase al 100% a un Tour de Francia donde fue derrotado por segunda vez por Jonas Vingegaard.
- Strade Bianche 2025: pese a que era el mejor con diferencia, Pogacar sufrió una dura caída a 50 km de meta. Lo hizo cuando lideraba junto a Tom Pidcock y Connor Swift, a priori fáciles para él. A pesar de las visibles heridas y abrasiones por todo su cuerpo, el esloveno volvió a la carrera y pudo ganar con un ataque sobre Pidcock a 19 km del final.
- Tour de Francia 2025: en la 11ª etapa, el esloveno fue derribado por Tobias Johannessen, de Uno-X Mobility. Eso pudo haberle provocado una pérdida de tiempo importante respecto a Jonas Vingegaard y el resto de rivales en la general, pero le esperaron. Si en Visma no se hubiese tomado esa decisión, quizás no hubiese ganado su cuarto Tour.
Es duro para sus rivales, pero no hay otra realidad: solo se puede ganar a Tadej Pogacar si el esloveno comete algún error. Eso lo tienen que tener grabado a fuego Jonas Vingegaard, Cian Uijtdebroeks y otros rivales como Remco Evenepoel y Florian Lipowitz, que serán colíderes de Red Bull - BORA - hansgrohe también en el Tour de Francia 2026.
Si vuelve a ocurrir algo como lo de la etapa 11 del Tour de 2025, no se puede esperar a Pogacar. No por él, sino porque UAE ha demostrado con hechos que no lo hace cuando a ellos les beneficia. El ejemplo más reciente está en la Coppa Agostoni 2025, cuando Adam Yates no quiso esperar a Carlos Canal, de Movistar, que sufrió un pinchazo cuando ambos se iban a disputar la victoria en un cara a cara.