"Miro atrás con orgullo por todo lo que me han dado": Un gregario de Remco Evenepoel se retira con 29 años

El ciclista belga Jordi Warlop ha anunciado el final de su carrera tras ocho años en el pelotón profesional, una decisión que llega a una edad relativamente temprana: 29 años. Con un mensaje sincero en su cuenta de Instagram, el corredor reflexionó sobre sus años de esfuerzo, aprendizajes y satisfacciones, dejando claro que su despedida no es un adiós al deporte, sino el inicio de una nueva etapa.

En su comunicado, Warlop expresó su gratitud por todo lo vivido sobre la bicicleta y por las personas que lo acompañaron durante su trayectoria. "Después de 8 años como ciclista profesional, mi carrera llega a su fin. Miro atrás con orgullo por todo lo que me han dado estos años: días de carreras, diversión, emociones, pero sobre todo la gente que he podido conocer por el camino", escribió.

El belga también quiso resaltar el espíritu de perseverancia que lo acompañó en los momentos más difíciles. "Tuve que volver más de una vez después de contratiempos o lesiones. Cada vez, levantarme de nuevo, volver a empezar, mantener la fe... Esa puede que sea mi mayor victoria", añadió con sinceridad.

Aprovechó además para agradecer a quienes fueron parte de su viaje profesional. "Un enorme agradecimiento a todos los equipos de los que he formado parte, a los compañeros de equipo, al personal, a los patrocinadores, a la familia y a los aficionados que siempre me han apoyado. Sin vosotros, esta aventura no habría sido posible", subrayó.

Warlop cerró su mensaje con un tono esperanzador, mirando hacia el futuro con ilusión: "A un nuevo capítulo, con tanta pasión, sólo que a otro ritmo".

La carrera de Jordi Warlop no estuvo marcada por un ascenso meteórico al WorldTour, sino por la constancia y el trabajo silencioso. Comenzó su andadura profesional en el Sport Vlaanderen - Baloise, donde permaneció cuatro temporadas consolidándose como un corredor fiable y disciplinado. En 2022, fichó por el B&B Hotels - KTM, y más tarde se incorporó al Soudal Quick-Step, donde se desempeñó principalmente como gregario.

Durante la temporada 2023, alternó entre el equipo de desarrollo y el pelotón principal, hasta que fue ascendido al equipo WorldTour en el año siguiente. Allí se convirtió en un gregario de confianza para velocistas de la talla de Tim Merlier y Paul Magnier, demostrando su compromiso y capacidad táctica.

Aunque no logró victorias profesionales, Warlop dejó huella con su entrega y su espíritu combativo. En 2023, rozó el triunfo en la Muscat Classic, donde finalizó segundo, solo superado por Jenthe Biermans. Ese mismo año firmó otros resultados destacados, como un cuarto puesto en el Grand Prix Criquielion y un sexto en el Grote Prijs Jean-Pierre Monseré.

Sus primeros años también estuvieron marcados por actuaciones prometedoras: fue subcampeón en los Campeonatos de Europa Junior de Carretera 2014 y tercero en la París-Roubaix Espoirs 2017, mostrando desde joven su talento para las clásicas.

Aunque deja atrás la vida del pelotón, Jordi Warlop se despide con la serenidad de quien lo ha dado todo y se lleva mucho más de lo que soñó. Su legado no se mide en victorias, sino en la constancia, la entrega y la pasión que mostró en cada kilómetro recorrido.

Con sus propias palabras, el ciclista lo resumió mejor que nadie: "Cada vez que me caí, volví a levantarme. Esa puede que sea mi mayor victoria".