Primoz Roglic ha reconocido que piensa cada vez más en la retirada, e incluso ha deslizado la posibilidad de volver a sus orígenes en los deportes de invierno una vez que cierre su etapa como ciclista profesional. En la Profronde de Etten-Leur, en los Países Bajos, el esloveno dejó entrever que su tiempo en el WorldTour podría estar llegando a su fin, con las prioridades familiares y nuevas ambiciones cobrando más peso en su vida.
"Hoy en día se trata de sobrevivir, y a mi edad el día en que lo deje está cada vez más cerca", confesó a
HLN. "Ya no tengo 20 años, así que naturalmente miro mi futuro de otra manera. También quiero hacer otras cosas en la vida. Quizá volver a los deportes de invierno, donde empezó todo para mí. No, no a los saltos de esquí, eso es cosa del pasado. ¿Pero los Juegos Olímpicos de Invierno? Eso estaría muy bien, aunque por ahora sea poco realista".
Antes de sufrir la caída que le obligó a abandonar el salto de esquí a los veinte años, Roglic llegó a ser subcampeón mundial júnior en esa disciplina. Esa vida anterior todavía marca sus reflexiones sobre el futuro. Y aunque lo menciona medio en broma, se imagina con 40 años en los Juegos de Invierno de 2030 en los Alpes franceses: “Envejecer bien, como un buen vino”.
Sus declaraciones llegan poco después de decidir renunciar a la Vuelta a España, donde era campeón defensor, para pasar más tiempo con su esposa y sus dos hijos pequeños. "Ya no puedo estar en todas partes. En casa tengo una mujer y dos hijos, y merecen mi atención. El ciclismo es mi trabajo, pero mi familia lo es todo para mí. Por encima de todo soy un marido y un padre, y solo después un deportista”.
El preocupante mensaje de Roglic
A sus 35 años, Roglic viene de terminar el Tour de Francia en la octava plaza de la general, sin opciones de victoria de etapa pero satisfecho con haber llegado a la tercera semana. El esloveno asegura vivir “día a día”, y aunque su futuro en el Red Bull-Bora no está definido, resulta evidente que uno de los corredores por etapas más laureados del último decenio ha empezado a mirar más allá de la bicicleta.
Preguntado por su motivación, dejó una respuesta enigmática: “Ya veremos”. Pero también una certeza: “Con mi edad, cada vez está más cerca el día en que lo deje. También quiero hacer otras cosas en la vida”.