Matteo Jorgenson está corriendo estos días el Tour de Guantxi, su última carrera con
Movistar Team. El americano cumple su cuarta temporada en una estructura a la que, según él, le está costando bastante adaptarse a los nuevos estándares del ciclismo. En declaraciones a los compañeros de Relevo su discurso es curioso: pasa de criticar a los medios por criticar las tácticas y a continuación critica duramente al equipo por no evolucionar.
Es curioso que Matteo afirma por un lado que cuando publicó el hilo de Twitter hace unos meses en el que explicaba que su progresión deportivo en 2023 se debía a que había invertido su propio dinero en mejoras no era una crítica al conjunto telefónico:
"No, para nada. Todo se puede interpretar de todas las maneras, pero no era mi intención en absoluto. Cada equipo cuenta con un presupuesto 'x'. Y a partir de ahí, es una cuestión de cada ciclista. Si formas parte de un equipo que no te puede facilitar ciertas cosas, eres tú quien debes encargarte de ellas. Yo no quería criticar al equipo con ese hilo. Sólo trataba de responder a las preguntas que mucha gente se hacía en ese momento sobre mi progresión, que parecía muy rápida respecto al año anterior. Quise explicar cómo lo hice, y nada más; pero mucha gente creyó que estaba criticando a Movistar".
Decimos que es curioso que diga que no es una crítica, porque a continuación es preguntado por si cambiaría algo en la forma de trabajar del equipo y es muy claro:
"Todo se resume en que el núcleo duro del equipo es bastante viejo. Las personas que forman ese núcleo duro, quienes más años llevan en el equipo, han conocido un ciclismo diferente al de hoy en día. En los últimos 10 años, el ciclismo ha cambiado más que en los 50 años precedentes según lo que he podido aprender conversando con exciclistas y directores. Al equipo le está costando bastante adaptarse a los nuevos estándares del ciclismo: la forma de competir, la forma de prepararnos…".
Jorgenson pone el ejemplo de
Patxi Vila, que ya ha salido de la estructura, afirmando que él intentó cambiar cosas y que no pudo:
"He visto a personas tratar de cambiar esto, pero es difícil y requiere mucho tiempo, y convencer a mucha gente, y tener conversaciones muy duras. Por ejemplo, Patxi Vila se ha pasado cuatro años en el equipo, básicamente tratando de cambiar cosas. Y, en cuatro años, muy poquito ha cambiado de verdad y de la manera en que él deseaba. Y eso sucede porque el equipo lleva mucho tiempo en marcha".
Al final el americano se lia en su respuesta a Relevo, afirmando que eso de cambiar y no cambiar a la vez es positivo y negativo. Vamos, que se dio cuenta del rajadón que le estaba dando al conjunto que le ha hecho profesional y quería cortarse un poco:
"Lo cual es también positivo, porque significa que tiene unos ciertos valores y unos ciertos motivos para cómo hacen las cosas, y ésa es la razón por la que el equipo ha sobrevivido tanto tiempo: no se deja llevar por las tendencias. Pero, cuando llevas tanto tiempo en marcha, es difícil cambiar las opiniones y los puntos de vista de las personas. Así que, en definitiva, es un problema humano. Un problema de intentar cambiar la mentalidad de las personas, que es algo muy difícil de hacer".