La prestigiosa
Strade Bianche, una clásica carrera de grava enclavada en los paisajes pintorescos de la Toscana, se prepara para una edición aún más exigente en 2024. Rompiendo con su formato tradicional, la carrera de este año verá un aumento significativo en la distancia, superando por primera vez la marca de los 200 kilómetros.
En ediciones anteriores, la clásica de grava se mantenía en una distancia de 184 kilómetros, insuficiente para reclamar el título de sexto monumento. El Tour de Flandes, París-Roubaix, Lieja-Bastogne-Lieja, el Tour de Lombardía y Milán-San Remo, todas superan los 240 kilómetros.
En 2024, según información de hln.be, la Strade Bianche da un paso tímido hacia un estatus más elevado. Por primera vez, la distancia superará la mágica marca de los 200 kilómetros. Además, los kilómetros adicionales no vienen de manera gratuita. En lugar de 11 tramos de grava con un total de 63 kilómetros sin pavimentar, el pelotón del 2 de marzo se enfrentará a un recorrido con 15 secciones de sterrato, sumando más de 70 kilómetros sin asfalto, un desafío que promete poner a prueba las habilidades de los ciclistas en un terreno implacable.