En el final de la segunda etapa del
Tour de Romandía Féminin, Kasia Niewiadoma se encontró entre la espada y la pared. Fue la única capaz de seguir el ritmo de
Demi Vollering en la subida final a Torgon.
En los últimos kilómetros, Vollering no apretó más, queriendo que su compañera de equipo Marlen Reusser remontara. Sin embargo, Niewiadoma tomó el relevo y acabó tirando de Vollering hasta la línea de meta, donde la corredora del SD Worx esprintó hacia la victoria de etapa y el liderato de la general. Tras la llegada, Vollering incluso pidió disculpas a Niewiadoma.
"No tengo una respuesta fácil para ello. No me entusiasmaba que SD Worx me volviera a emparedar, pero si dejara de pilotar, no creo que Marlen o Demi empezaran a tirar de mí", explicó Niewiadoma;
"Me atacaban uno a uno. Ya he estado en esa situación antes. Los 2 km finales no eran lo suficientemente empinados como para intentar soltar a Demi de mi rueda", concluye Niewiadoma.