Jonas Vingegaard estuvo muy en forma en el Criterium du Dauphiné del año pasado y lo dominó junto a Primoz Roglic. Sin embargo, el danés lidera ahora en solitario este año el
Jumbo-Visma y, de cara al Tour de Francia, quiere dejar su huella.
"Me siento bien. Mi primavera ya ha ido bien y mi estado de forma es bueno. Siempre me gusta venir aquí para el Dauphiné porque es una carrera maravillosa. El año pasado la ganamos con Roglic. Este año quiero ser yo el ganador", dijo Vingegaard en un comunicado de prensa. Lidera un equipo fuerte, formado por la mayoría del bloque del Tour de Francia, incluidos hombres como Steven Kruijswijk y Christophe Laporte, que serán cruciales.
Se trata de una prueba para el bloque del Jumbo-Visma, que trabaja por el objetivo común de la victoria en la general. La carrera montañosa de ocho días también incluye una contrarreloj decentemente larga en la que se espera que saque tiempo a sus rivales antes de que la carrera llegue a los Alpes. Allí tendrá una larga lista de fuertes contendientes que podrían igualarle o superarle en las circunstancias adecuadas.
"Puede que me lo tome con calma en las primeras etapas. Luego intentaré sacar todo el partido de la contrarreloj antes de dirigirnos a las montañas", concluye el líder del Jumbo-Visma. "Tengo un equipo fuerte y sé que todo el mundo está en buena forma. Iremos día a día. Hace tiempo que no corro, así que lo estoy deseando".