La etapa 13 del
Tour de Francia 2024, previa a la llegada a la alta montaña de los Pirineos, se presentaba como una jornada peligrosa por su recorrido rompepiernas, aunque el esprint del pelotón no estuviese descartado. Al final, dicho recorrido iba a provocar que el espectáculo fuese mayúsculo, y se iba a decidir con victoria de
Jasper Philipsen. El corredor del
Alpecin-Deceuninck se ponía en el esprint a
Wout van Aert y
Pascal Ackermann.
DESARROLLO
Los primeros kilómetros de etapa tuvieron de todo. El estrés fue absoluto. Un grupo delantero de 23 corredores, entre los que se encontraban Adam Yates, Oier Lazkano, Mathieu van der Poel, Arnaud de Lie, Rui Costa y Magnus Cort Nielsen, entre otros, se adelantaba sobre el pelotón.
La presencia sobre todo de Yates, que es uno de los favoritos de la general a pesar de ser gregario de Tadej Pogacar, provocó que en el pelotón el ritmo fuese altísimo. De hecho, Visma - Lease a Bike capitaneó un ataque con Wout van Aert donde se metieron Jonas Vingegaard, el propio Pogacar y Remco Evenepoel.
Juan Ayuso, que había comenzado la etapa después de anunciarse su positivo por COVID, no pudo seguir el ritmo del pelotón a causa de ello, y terminó retirándose de la carrera en otro desgarrador abandono para el ciclismo español en este Tour de Francia, uniéndose a Pello Bilbao, Ion Izagirre y Jesús Herrada hasta ese momento.
Tras el anuncio del abandono de Ayuso, en la carrera los favoritos volvieron al pelotón a 122 km de meta. La velocidad del grupo delantero era muy exigente, y no tenía sentido perder tanta energía tan pronto. Como consecuencia, en ese momento la fuga de 23 corredores tenía una ventaja de 52 segundos.
A 91 km de meta, un ataque en la fuga de 4 corredores, Michal Kwiatkowski, Magnus Cort Nielsen, Romain Gregoire y Julien Bernard, partía la escapada en dos, y se colocaba con una ventaja de 39 segundos sobre el grupo perseguidor con Lazkano, Yates y Van der Poel, y a 1 minuto y 24 segundos del pelotón.
Casi 15 km después, a 77 de meta, los cuatro corredores ya habían conseguido confirmar la nueva fuga del día, ahora mucho más reducida, después de sacar más casi 1 minuto al grupo perseguir con Lazkano, Yates, De Lie y Van der Poel.
A 70 kilómetros de meta, el pelotón consiguió cazar ya al grupo de Oier Lazkano, Adam Yates, Arnaud de Lie y Mathieu van der Poel. Sólo quedaban por delante los cuatro valientes de la fuga. Exactamente 10 km después, el viento de costado iba a provocar abanicos en un pelotón partido en dos que estaba a 42 segundos de la escapada.
Esta situación iba a debilitar a los escapados. El grupo delantero del pelotón, con los favoritos a la general, se ponían a 13 segundos de la fuga a 52 km de meta. Dicho grupo estaba formado por 43 corredores con Tadej Pogacar, Jonas Vingegaard y Remco Evenepoel metidos, además de Biniam Girmay como gran favorito al esprint, aunque parecía difícil que se pudiese dar a estas alturas. Sin embargo, no había presencia de ningún Movistar Team.
Apenas 2 kilómetros después la fuga iba a ser ya del todo neutralizada por ese pelotón delantero de 47 corredores que, a 50 de meta, le sacaba 47 segundos al segundo pelotón. A 40 km de meta se iban a dar dos ascensiones de 4ª categoría que podrían ser decisivas para el desenlace final de la etapa.
Como se preveía, el pelotón no se iba a mantener firme en estas dos ascensiones. Al inicio de la primera de ellas, Richard Carapaz lanzaba un ataque al que se unía Tobias Johannessen, consiguiendo 10 segundos de ventaja tras los primeros metros. A 34 km de meta, los dos corredores consiguieron aumentar la distancia a los 20 segundos.
Entrando en el cartel de 30 kilómetros para la meta, Carapaz y Johannessen le sacaban 30 segundos al pelotón tras un esfuerzo monumental por parte de los dos corredores. La etapa se había convertido en una caza contrarreloj del grupo principal en busca de los dos fugados, que a 25 km de meta estaban a 26 segundos.
Pese a la enorme valentía de Carapaz y Johannessen, el pelotón iba a neutralizarles por completo a 21 km de meta. Aprovechando que el grupo principal volvía al frente de la carrera, Jasper Stuyven se lanzaba al ataque a 18 km de meta junto con Fabien Grellier y Brent van Moer. En la pancarta de los 15 km para meta, la ventaja de los tres corredores sobre el pelotón era de 12 segundos.
A 12 km de meta, Fabien Grellier se quedaba atrás, y en esta fuga provocada por el ataque tardío de Jasper Stuyven se mantenía con el corredor de Lidl-Trek y Brent van Moer a 11 segundos del pelotón. Sin embargo, esto no iba a llegar a mucho más, ya que a 10 de meta el grupo principal volvía a la cabeza de carrera. ¡Estaba siendo una maravilla de atapa!
En la recta final, cualquier cosa se podía esperar. A 5 km de meta, todo apuntaba a un esprint entre los pocos velocistas que quedaban dentro del pelotón tras esta jornada tan intensa. Al final, la victoria fue para Jasper Philipsen, que aunque estaba solo en el esprint, se consiguió imponer a Wout van Aert, 2º, y Pascal Ackermann, 3º.