Algunos estarán hoy poniendo en duda la táctica de UAE Team Emirates de los últimos días intentando salvar a
Juan Ayuso en todo momento y no dándole alas a
Isaac del Toro cuando mejor se encontraba.
Pero UAE hizo en esas jornadas lo que tenía que hacer: intentar que su corredor experimentado, el corredor en el que habían confiado para ganar el
Giro de Italia, siguiera vivo pese a los percances.
Isaac del Toro, por un cúmulo de circunstancias y por su increíble clase se ha visto en un lugar que no le tocaba: el de verse maglia rosa del Giro de Italia con la responsabilidad de liderar al mejor equipo del mundo.
¿Por qué? Porque hemos visto al Primoz Roglic del Tour, que está más en el suelo que pedaleando. Y porque no hemos visto a Juan Ayuso y a
Adam Yates (no se puede ir de rositas el británico) a la altura de las circunstancias.
Porque una cosa es no dar el nivel ante Jonas Vingegaard, Tadej Pogacar, Remco Evenepoel o incluso Joao Almeida o Primoz Roglic, y otra cosa es no estar a la altura de los que se están jugando este Giro de Italia 2025.
Con todos los respetos que me merecen Richard Carapaz, Egan Bernal, Simon Yates o Derek Gee, quedarte con ellos es no merecer ser el líder de un gran equipo. Ayuso, sin merecerlo seguramente (debieron apostar por Almeida y a los hechos me remito, pero cuando eres un gran gregario tu 'premio' es un con Pogacar al Tour), se ganó la oportunidad de ser el líder de UAE en este Giro. Gianetti dejó claro que iba a ser su única grande del año. Y no ha estado a la altura. Yates ya queda como gregario, así que poco más que decir, aunque es increíble que hace dos años reventara a su hermano en el Tour y ahora esté lejísimos de él. Cosas del ciclismo...
¿Ayuso a Movistar el año que viene? Veremos como se comporta de aquí a Roma para tirar o no el rumor.
Mientras tanto, Isaac del Toro debe seguir luchando. Parece complicado que consiga aguantar la maglia rosa hasta Roma, pero debe aprovechar el mal rendimiento de sus compañeros para subir sus prestaciones como ciclista. Este aprendizaje es de un valor incálculable para él.