El próximo 13 de abril, el pelotón afrontará uno de los mayores desafíos del ciclismo profesional: la París-Roubaix, conocida popularmente como el infierno del norte. Este será el tercer monumento de la temporada y el gran cierre del ciclo de las clásicas adoquinadas, con un recorrido plagado de dureza y leyenda. Nada menos que 55 kilómetros sobre adoquines, distribuidos en 29 sectores, marcarán las diferencias en una carrera que cada año se convierte en uno de los momentos más esperados del calendario.
La prueba arrancará en Compiègne y recorrerá 259 kilómetros hasta el icónico velódromo de Roubaix, en una edición que mantiene su trazado habitual. Los primeros tramos llanos permitirán que se forme la escapada tras unas dos horas de carrera, pero será una fase tensa y con ritmo altísimo, ya que la batalla por estar al frente será feroz. Muchos equipos buscarán colocar hombres por delante con fines estratégicos, más aún si el viento o la meteorología entran en juego.
El primer sector adoquinado llegará en Troisville, tras 95 kilómetros de carrera. Con 2,2 km de extensión, este tramo ya puede empezar a desgastar al pelotón, como sucedió en 2024. Pero será el inicio de una sucesión de sectores que transformará la jornada en un auténtico desafío físico y técnico.
Entre los puntos más destacados figura el mítico sector de Arenberg (Trouée d'Arenberg), que aparece cuando restan 93 km. Aunque "sólo" tiene 2.300 metros, su peligrosidad y la alta velocidad a la que se afronta lo convierten en uno de los puntos más tensos de toda la prueba. Una mala elección de trazada aquí puede acabar con cualquier aspiración.
Otros sectores clave incluyen:
El tramo final incluye dos sectores que suelen decidir la carrera:
Todavía quedará un último obstáculo: el sector de Willems a Hem (6,5 km de meta), de 3 estrellas. Aunque normalmente no se producen diferencias aquí, en un grupo reducido podría haber movimientos sorpresa.
La llegada al velódromo de Roubaix será, como siempre, el desenlace simbólico de una batalla de resistencia, habilidad y táctica. Sea en solitario o en un pequeño grupo, el vencedor será, sin duda, un digno triunfador de una de las carreras más brutales y gloriosas del ciclismo.
The race for monuments is 🔛
— Paris-Roubaix (@parisroubaix) April 7, 2025
A new opportunity on Sunday!
La course aux monuments continue 🏆
Une nouvelle opportunité dès dimanche !#ParisRoubaix pic.twitter.com/fqpkces6Ji