Un doblete en la Paris-Roubaix 2023 puede ser fácilmente uno de los mejores resultados de la historia del
Alpecin-Deceuninck. Sin embargo, esto no surgió de la nada, ni se debió al talento supremo del líder del equipo,
Mathieu van der Poel, ni a la tremenda exhibición de
Jasper Philipsen. Todo formaba parte de un plan previsto hace tiempo por Philip Roodhooft.
"El invierno pasado decidimos conscientemente enfrentarnos a los mejores equipos en las grandes carreras", reveló Philip Roodhooft, director del Alpecin-Deceuninck, tras el Infierno del Norte. "Sabíamos que eso tendría consecuencias en el número de victorias. En su momento eso no es divertido, pero si sabes por qué, es más fácil y ahora las expectativas se han cumplido con creces."
La victoria de Mathieu van der Poel, respaldado por Jasper Philipsen que superó a Wout van Aert en la segunda posición, fue la culminación de años de duro trabajo para Roodhooft y el resto del Alpecin-Deceuninck, pero el hombre detrás del éxito se apresura a señalar que no son el único equipo puntero en el pelotón World Tour.
"No esperábamos dos monumentos. Pero había un plan detrás. Si haces las cosas bien y el talento está ahí, los resultados llegarán", dice Roodhooft antes de discrepar de que ahora sean el equipo a batir. "Se puede decir eso, pero hace dos semanas todavía era Jumbo-Visma", explica. "Se pasa muy rápido, pero nuestra ambición era estar ahí en los grandes momentos. Es estupendo que lo hayamos conseguido".