Tadej Pogacar es un talento generacional. Incluso dentro de los corredores de categoría mundial, "Pogi" parece estar en un nivel propio, habiendo crecido como corredor de etapas de primera, pero desde el año pasado especializándose también en las clásicas de primavera. Prácticamente no hay carrera en la que Pogacar no pueda luchar por un resultado y
Fabian Cancellara se pregunta si se le puede encasillar
"Qué tipo de corredor es. ¿Lo seguimos considerando un corredor de grandes vueltas, sí o no?". escribió Cancellara en una columna para Cyclingnews. "Nunca he visto a un vueltómano atacar así en las clásicas. ¿Veríamos a Jonas Vingegaard haciendo lo que Tadej ha hecho hoy? Imposible. El último corredor que ganó Harelbeke y el Tour de Francia fue Geraint Thomas, pero tuvo que tomar decisiones y especializarse en un área determinada."
Tras haber mostrado un gran rendimiento el año pasado en la Milán-San Remo y en el Tour de Flandes, se consolidó como un legítimo aspirante a la victoria en esos dos monumentos. Dos carreras en las que normalmente los corredores por etapas -especialmente los especialistas en Grandes Vueltas- rara vez rinden al máximo nivel, pero no es el caso del esloveno.
En 2023 sus objetivos eran los mismos para la primavera, y hasta ahora no ha decepcionado. "El estilo de Tadej es atípico para un corredor de Gran Vuelta: esa forma de moverse, de pasar con potencia por los adoquines, de forzar tanto en las subidas. Es natural. Para mí, en este momento parece más un corredor de clásicas de un día que un corredor de Gran Vuelta", admite Cancellara.
"Así que la pregunta es... ¿va Tadej a todo gas a todas estas carreras porque en verano ve que tiene problemas con el calor y las montañas largas en comparación con su competencia, que es Jonas Vingegaard. ¿Le encanta correr estas carreras? ¿Lo ve como una oportunidad más de ganar carreras?". se pregunta. La Lieja-Bastogne-Lieja aún está en su calendario para la primavera, pero ha demostrado ser capaz de mantener una forma alta durante mucho tiempo, y no ha hecho un campamento de altitud como muchos de sus rivales.
Un cuarto puesto en Milán-Sanremo demostró la forma continua de Pogacar en las carreras de un día, y su postura agresiva y su tercer puesto le sitúan como gran favorito para el Tour des Flandres. "Yo corría para ganar carreras ciclistas y esto es lo mismo que hace él. Le tengo mucho respeto. Sea el tipo de corredor que sea, es bueno para este deporte", concluyó Cancellara.