Manon Bakker, del
Crelan-Corendon, tuvo una buena actuación en un día difícil en un ciclocross de Gullegem brutalmente embarrado, donde la superficie fue la principal protagonista de la jornada, pero donde no pudo conseguir la victoria conformándose con el segundo puesto.
"Ha sido duro, pero también una batalla superdivertida con
Zoe Backstedt e
Inge van der Heijden", dijo Bakker en su entrevista posterior a la carrera. "Al principio, pensé: Me gusta mucho la última parte. Yo también lo intenté, pero Zoe es muy fuerte. Se alejó de nosotros en el asfalto. En realidad esperaba que Inge cerrara la brecha en la recta porque sé que es un poco mejor en eso. Pero ya no pudimos alcanzarla. Creo que es la merecida ganadora".
Bakker y su compañera de equipo se vieron obligadas a luchar por el segundo puesto. "La verdad es que tardé demasiado en reaccionar. Debería haberlo sabido, porque Zoe lo hace todo el tiempo. A menudo lo llamo el 'ataque Zoe', destrozando a todo el mundo en las rectas de la carretera. Llegué demasiado tarde. Aposté por Inge, pero no funcionó", reflexiona Bakker;
"Luego yo misma cometí un error, lo que hizo aún más emocionante el segundo puesto. Pero por suerte al final fui mejor", concluye. "Cuando cometí ese error, pensé en la mierda por un momento. Me fui contra las barreras, porque había que conducir cerca del borde. Pensé: oh, allá voy... Entonces Inge me adelantó. En realidad quería estar en cabeza en el último tramo, pero en el puente de bajada pude adelantarla de nuevo".