El presidente de la federación belga, Tom Van Damme, tampoco está de acuerdo con el presidente de la UCI, David Lappartient, que recientemente criticó abiertamente a
Thibau Nys por saltarse la Copa del Mundo de Dendermonde. ¿Cuál es la solución del presidente de la federación para hacer más atractiva la Copa del Mundo?
"Está claro que la Copa del Mundo es demasiado grande en estos momentos", afirma. "Yo abogo por una reducción: un máximo de 8 a 10 carreras, con idealmente una sola carrera por país. Eso sí que es promoción para el ciclocross".
La participación no debería ser obligatoria. "Entonces tendríamos un campo de 10 a 15 corredores, sin los mejores. La participación tampoco es obligatoria en el ciclismo de montaña y en la carretera. El ciclocross no debería ser una excepción".
"Vincular la participación en el Mundial a ello tampoco me parece una buena decisión. Entonces se obtiene un Mundial perjudicado. Eso a su vez tiene consecuencias para los intereses de los organizadores. Eso es cortar en su propia carne".