Ceylin del Carmen Alvarado consiguió reafirmar su victoria en la Copa del Mundo pese a sus dolores de espalda

Ceylin del Carmen Alvarado tuvo un día duro en Hoogerheide, pero llegó a la meta como ganadora de la Copa del Mundo de Ciclocross por primera vez en su carrera.

La neerlandesa ya había sellado matemáticamente su victoria la semana anterior en Benidorm, donde había terminado tercera, pero aun así tomó la salida en la 14ª prueba de la competición, en la que el podio estaba confirmado independientemente de su actuación. Lo único que le interesaba era ganar: "No es que corras por los puntos, sino puramente por la victoria del día, pero eso no hace que la carrera sea diferente".

Pero no fue así. En las primeras vueltas estuvo cerca de la cabeza, pero una vez más se vio afectada por los dolores de espalda que la han afectado en las últimas semanas. "Por un momento te decepciona y luego se convierte en una pequeña decepción. ¿Qué haces entonces? En un mal día puedes seguir montando, creo, pero ahora mi espalda estaba a mi espalda". Sin necesidad de ir a por todas, bajó el ritmo en las últimas vueltas y terminó 15ª.

"Fue bastante difícil. Opté por seguir corriendo a mi ritmo. Veremos si ha sido la mejor elección. Creo que se necesita tiempo, porque ya hago bastante", concluye. Ahora, todos los ojos están puestos en el Mundial de Tábor para Alvarado, donde es candidata al podio y quizás a la victoria si encuentra sus mejores piernas.

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