Wout van Aert, el versátil ciclista del equipo
Jumbo-Visma, volvió a demostrar su valía al encabezar el grupo de favoritos en la exigente etapa del Puy de Dôme. Van Aert trabajó duro para mantener un ritmo alto en beneficio de su líder, Jonas Vingegaard, y luego pudo recuperarse con relativa tranquilidad.
En la cima del Puy de Dôme, Van Aert se encontró con las cámaras de Sporza y respondió a algunas preguntas antes de dirigirse al autobús del equipo. Hablando sobre la subida, Van Aert comentó: "Sí, es una subida muy empinada. Además, se mantiene empinada todo el tiempo. También es regular, así que mantienes la tensión en las piernas constantemente".
Van Aert también mencionó que no solo los últimos cuatro kilómetros son duros, sino que incluso en la carretera ancha previa se sentía la dificultad. El objetivo del equipo Jumbo-Visma era trabajar para Vingegaard, pero Van Aert reconoció que tanto Vingegaard como Tadej Pogacar se igualaron nuevamente en la subida. Al final, Pogacar se impuso con una ventaja de ocho segundos sobre Vingegaard en un emocionante duelo mano a mano.
Cuando se le preguntó sobre la estrategia del equipo Jumbo-Visma para ganar tiempo, Van Aert explicó: "Esta etapa no era necesariamente una etapa para Jonas. Era demasiado fácil en la carretera para marcar la diferencia. De todos modos, hoy el plan era marcar el ritmo en la subida".
Después de la etapa, Van Aert mencionó el calor extremo que afectó a muchos corredores. "Sí, hacía un calor tremendo, así que creo que algunos chicos no se sentían realmente bien. Afortunadamente, mañana tenemos un día de descanso, aunque también terminará temprano".
El desempeño de Wout van Aert en el Puy de Dôme muestra una vez más su versatilidad y capacidad para liderar al grupo de favoritos. A medida que el
Tour de Francia continúa, los aficionados del ciclismo estarán ansiosos por ver más acciones emocionantes y desafíos en las próximas etapas.