Tras ganar la 19ª etapa del Tour de Francia, Matej Mohoric habló de la motivación que le dio Gino Mäder, de la brutalidad del ciclismo y del síndrome del impostor que siente al arrebatar las victorias a otros corredores. Por ello, se le concedió el protagonismo para hablar una vez más al final del Tour de Francia en París.
Tras llegar a los Campos Elíseos, para muchos fue un momento de celebración. Para el esloveno también lo fue de reflexión, ya que ha terminado un gran bloque de entrenamientos y carreras en el que ha vuelto a hablar de las penurias del ciclismo profesional y de cómo Bahrain - Victorious se mantuvo unido contra la adversidad.