Chris Froome fue uno de los ciclistas cuya ausencia en la lista de participantes del
Tour de Francia 2023 sorprendió a todos los aficionados. El veterano corredor se mostró decepcionado con ello tras conocerse los hechos. Sin embargo, ahora habla del tema con más complejidad, semanas después de que se produjera la impactante noticia.
"Me tomé un tiempo de descanso después de no haber sido seleccionado para el Tour de Francia. Había estado trabajando muy duro toda la temporada para llegar a ese punto", dijo Froome en un vídeo de Youtube titulado "ESTABA LISTO PARA EL TOUR". "Fue una gran decepción, una gran decepción no entrar en el equipo del Tour de Francia este año, realmente me sentía como si estuviera en el buen camino, como si físicamente estuviera listo y alcanzara todos mis objetivos en términos de peso para la carrera".
El
Israel - Premier Tech no tenía buena pinta antes de la Ruta de Occitania, ya que carecía de líderes y de muchas opciones de triunfar en el Tour, donde contaba con una wildcard automática. En la carrera francesa Michael Woods ganó la clasificación general -y en el Tour ha ganado en el emblemático Puy de Dôme-. Para Froome, las cosas no le fueron demasiado bien en lo que a suerte se refiere.
"La clásica de un día del Mont Ventoux no me fue nada bien. Tuve un pequeño problema mecánico, se me atascó algo en las bielas justo al pie del Ventoux. Cambié de bicicleta, me subí a una de repuesto y, por alguna razón, el manillar estaba completamente doblado, así que debió de golpearse con algo en el techo del coche, y tuve que volver a cambiar de bicicleta. En primer lugar, no soy un gran corredor de un día, nunca he conseguido un buen resultado en una carrera de un día, así que correr varias carreras de un día no era lo ideal", explica.
Después de ser el corredor mejor clasificado del equipo en la Mercan'Tour Classic con un 14º puesto, prometía estar presente en la Grande Boucle. Sin embargo, en Ventoux -tras el recorte de la ruta- los problemas mecánicos le apartaron de la lucha, y en Occitania lo dio todo para ayudar al canadiense a ganar la carrera: "También hice la Ruta de Occitania, que tenía un gran día de escalada y era en ese día en el que necesitaba demostrar lo que sería capaz de hacer en el Tour de Francia, pero por desgracia me sentí completamente bloqueado en la parte baja de la espalda", admite.
"Sentía que algo no iba bien, no empujaba bien la bici. Cuando terminé la etapa, le pedí a Gary [Blem] que comprobara cómo iba la bici y enseguida se dio cuenta de que mi sillín se había desplazado hacia atrás. Estaba demasiado estirado sobre la bici y no empujaba en la posición correcta. Fue frustrante porque era mi única oportunidad real de mostrarme antes del Tour de Francia", detalla, explicando además por qué había culpado a problemas de equipamiento de su ausencia en el Tour.
Chris Froome espera volver a la carrera, pero no hay ninguna certeza, sobre todo teniendo en cuenta que su contrato expira a finales de este año: "Sentía que todavía tenía mucho más que dar y mucho más que demostrar, fue decepcionante, pero el equipo ha optado por un enfoque diferente del Tour este año, así que he tenido que volver a centrarme".
"Me tomé un descanso. Mental y físicamente he estado trabajando tanto tiempo para llegar a ese punto que, al no conseguirlo, sentí que necesitaba desconectar un poco, desconectar mental y físicamente antes de volver a las andadas", concluyó.