Primoz Roglic no ha sido ajeno a los finales de carrera dramáticos a lo largo de su carrera en el pelotón profesional, habiendo perdido el
Tour de Francia y ganado el Giro de Italia en emocionantes finales contrarreloj en el pasado. Al estilo típico del esloveno, su victoria en el Criterium du Dauphiné de 2024 se decidió en el último momento.
Tras comenzar la última etapa con una ventaja de más de un minuto en la clasificación general, Roglic se vino abajo en la subida final, viendo cómo su principal rival, Matteo Jorgenson, del Team Visma - Lease a Bike, se escapaba carretera arriba. Al final, la experiencia del líder del
BORA - hansgrohe resultó clave, ya que consiguió limitar las pérdidas y salvar su Maillot Jaune por sólo 8 segundos en un emocionante final. La tensión de la etapa final fue palpable, con cada segundo contado, lo que hizo que la victoria de Roglic fuera aún más destacable.
Aunque para algunos este final de etapa pone en duda la capacidad de Roglic para competir con su compatriota Tadej Pogacar en el próximo Tour de Francia, el experimentado ciclista francés Cyrille Guimard sostiene que el espíritu de lucha de Roglic y el hecho de que se haya puesto a prueba lo colocarán en una buena posición para el próximo Gran Tour. Según Guimard, la caída de rendimiento de Roglic en el último día es una parte normal del ciclismo de alto nivel. "El hundimiento de Roglic el último día es completamente lógico y normal. Cuando hay tres días de alta montaña, nunca se está bien los tres días. Se resquebrajó un poco, pero no es el fin del mundo", escribe Guimard en su columna para Cyclism'Actu.
Guimard también señala que, a pesar de sus dudas iniciales sobre la capacidad de Roglic para ser un serio contendiente contra Pogacar, el desempeño del esloveno en el Dauphiné ha sido tranquilizador. "Roglic me pareció bastante tranquilizador en este Dauphiné. Yo era una de las personas que no creía realmente en el hecho de que fuera un rival importante de Pogacar en el Tour, pero sumó puntos a mis ojos en este Critérium du Dauphiné", afirma Guimard. Esta opinión subraya el hecho de que las actuaciones en carreras preparatorias pueden ser indicativas, pero no determinantes, de lo que sucederá en el Tour de Francia.
La victoria de Roglic en el Dauphiné, aunque ajustada, es un testimonio de su tenacidad y habilidad para manejar la presión en situaciones críticas. Sin embargo, Guimard advierte que para que Roglic triunfe en el Tour de Francia, necesitaría circunstancias de carrera bastante excepcionales o incluso dramáticas. "La victoria todavía es posible para Roglic, pero requeriría circunstancias de carrera bastante excepcionales o incluso dramáticas", concluye Guimard, destacando la formidable presencia de Pogacar como el principal obstáculo.
El consenso general es que Pogacar sigue siendo el favorito indiscutible para el Tour de Francia. "A día de hoy, nadie puede decir que Pogacar será o podrá ser batido en el próximo Tour de Francia, me parecería pretencioso decirlo. No veo quién puede ganarle a pedales", añade Guimard. Esta perspectiva refleja la dominación que Pogacar ha ejercido en el ciclismo mundial, convirtiéndose en una figura casi imbatible en las grandes vueltas.
En resumen, la victoria de Roglic en el Criterium du Dauphine de 2024 no solo añade otro trofeo a su ya impresionante carrera, sino que también refuerza su reputación como uno de los ciclistas más tenaces y capaces del pelotón. Su capacidad para sobreponerse a las adversidades y manejar la presión en momentos críticos será crucial mientras se prepara para enfrentar a Pogacar y otros contendientes en el próximo Tour de Francia. Mientras tanto, los aficionados al ciclismo estarán observando de cerca, anticipando otro emocionante capítulo en la rivalidad entre estos dos grandes ciclistas.