La noticia masiva de que la
París-Roubaix 2024 incluirá una chicane en la famosa Trouée d'Arenberg, en un intento de mejorar las condiciones de seguridad, ha sido recibida con una reacción mayoritariamente negativa por parte del pelotón.
El vigente ganador de la París-Roubaix, Mathieu van der Poel, ha sido el crítico más notable, retuiteando imágenes de la nueva parte del recorrido con la leyenda "¿Esto es una broma?". Sin embargo, la decisión no ha sido recibida totalmente con críticas, y uno de los defensores de la chicane es el "tractor" del Lidl-Trek,
Tim Declercq.
"Fui uno de los corredores que pidió a ASO que interviniera", explicó Declercq en conversación con Het Laatste Nieuws. "Es una locura, el tramo empeora año tras año. Se han roto muchas carreras por su culpa. Algo tenía que cambiar".
"Todo el mundo dice: el ciclismo debería ser más seguro. Pero en cuanto alguien presenta una propuesta, se señalan las desventajas", concluye este belga de 35 años y gran experiencia, que cuenta con nueve participaciones en la París-Roubaix en su palmarés. "Eso también es típico del ciclismo".