La
Tre Valli Varesine 2024 ha sido cancelada debido al mal tiempo. La clásica italiana se encontraba ya con 60 kilómetros rodados y Enric Mas en fuga (después de dos ataques del balear), pero las lluvias torrenciales no cesaban y finalmente se decidió suspender la carrera por la seguridad de todos los corredores.
Uno de los que
encabezó las protestas fue precisamente
Tadej Pogacar. El campeón del mundo ha explicado, tras la suspensión, las condiciones que estaban sufriendo:
"En la salida neutralizada ya había 7 pinchazos y un par de ruedas rotas. Intentamos correr, pero en la bajada de la última vuelta que hicimos estaba en segunda posición detrás de Alessandro Covi, pero no veíamos por dónde íbamos", explica la estrella del
UAE Team Emirates a Cycling Pro Net. "Todo el mundo quería parar. Era cuestión de saber en qué vuelta se caería alguien. Esas son las peores caídas cuando pierdes el manillar. Conozco a muchos amigos del pelotón que han sufrido conmociones cerebrales este año. Es algo con lo que tenemos que tener más cuidado en el pelotón".
Pogacar desvela el sufrimiento de los corredores
Sin embargo, Pogacar entiende que las cosas no terminaron de forma ideal para los organizadores de la carrera, que ahora no pueden presumir de una batalla potencialmente apetitosa entre algunos de los nombres más importantes del ciclismo, que se volverán a ver las caras el próximo sábado en
Il Lombardia.
"Entendemos que los organizadores quieran una carrera, pero al final los corredores han tomado la decisión correcta", concluye Pogacar. "Nos entristece que la carrera no continúe, pero es así. Por suerte todo el mundo fue razonable. Pude ver lo pesado que era para el jefe de la organización. Había lágrimas en los ojos. Esta carrera significa mucho para ellos, pero cuando no puedes correr no puedes. Lo entendieron inmediatamente. Estoy muy agradecido por ello".
