Taco van der Hoorn es un especialista en escapadas, y hoy en la
Kuurne-Bruselas-Kuurne ha puesto a prueba su habilidad. Luchó por la victoria, pero contra el Jumbo-Visma, el holandés tuvo que conformarse con un puesto de honor.
Van der Hoorn estuvo, como el año pasado, presente en la escapada del día. "Intenté quedarme sentado, sobrevivir a la zona de subidas, alcanzar a los más fuertes y luego disputar la llegada", dijo van der Hoorn sobre su plan. "Pero el pelotón remontó muy rápido. Seguimos rodando rápido durante todo el recorrido porque sabía que la carrera se abriría pronto. Quería conseguir una ventaja lo antes posible, pero el pelotón se acercaba muy rápido".
Sin embargo, cuando el Jumbo atacó la carrera, Van der Hoorn tuvo piernas para seguir el ritmo en las últimas subidas y pudo trabajar en un grupo de cinco corredores que le permitió conseguir una gran victoria. "Me sorprendí a mí mismo de poder seguirles el ritmo en el Mont Saint Laurent. No me desvié hacia el Knokteberg para evitar que me soltaran.
"Después hice mi trabajo a tope. Al final traté de ganar, pero era muy difícil con dos hombres del Jumbo-Visma", prosiguió. El corredor del
Intermarché - Circus - Wanty colaboró plenamente en el grupo, y cuando la victoria por delante estaba asegurada, trató de jugar con frialdad.
"Sí que había tenido en cuenta el sprint. Era muy difícil. Todo el mundo estaba igualado. Todos los huecos estaban cerrados. En realidad sabías que tenías que tener a alguien del Jumbo-Visma contigo, porque si no el otro lo cerraba. Así que en realidad sabías que iba a ser un sprint, tampoco pensé realmente en un ataque", explicó.
El holandés intentó guardar las piernas para un sprint, sin haber atacado en el final como hicieron van Hooydonck y Matej Mohoric. "Benoot atacó en el momento adecuado", admite. Van der Hoorn esprintó hasta la cuarta posición del día, pero ha mostrado un gran estado de forma de cara a la primavera.