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Mundial de Glasgow se ha visto sorprendido por una protesta que ha provocado que se haya ha detenido la carrera. Los manifestantes se pegaron a la carretera y esto hace imposible el paso de los vehículos, lo que lleva a una neutralización muy larga y difícil, y en su tiempo de inactividad los corredores se toman su tiempo para descansar como sea posible.
Uno de los escenarios más inusuales del ciclismo profesional. Las protestas se han convertido en los últimos años en una pequeña parte del deporte, sin embargo, tener una en esta carrera y que tenga tal efecto se convertirá inevitablemente en uno de los aspectos más destacados -negativos- del día. Algunos corredores se han sentado y tumbado en la carretera y en los coches de los equipos, mientras los aficionados aprovechaban para hacerse fotos con algunos de los corredores que no tienen más remedio que esperar.