Sonny Colbrelli fue un ciclista profesional de gran éxito en su época, pero se vio obligado a retirarse en la cima de su carrera hace poco menos de dos años debido a complicaciones cardíacas. Sin embargo, el italiano no abandonó el ciclismo y se formó para convertirse en DS del Bahrain - Victorious. Ahora, en un papel completamente distinto, explica cómo él y el equipo diseñan los calendarios de temporada para 30 corredores.
"... Para el calendario de un líder, por ejemplo, se empieza analizando los grandes objetivos: ¿Giro, Tour o Vuelta? O las grandes clásicas, si es un corredor de carreras de un día. Pero los atletas también tienen sus ideas y quieren expresar sus preferencias: hay quien dice 'me gustaría hacerlo bien en el Giro' o 'me gustaría aspirar al Tour'", dijo Colbrelli en conversación con Bici.Pro.
"Después, junto con los entrenadores, los directores deportivos y el manager, se empiezan a sentar las bases, a la espera de que se publiquen los recorridos oficiales de las carreras. Conocer los recorridos es crucial. Si, por ejemplo, el Giro incluye muchas contrarrelojes y un corredor está en desventaja en esta disciplina, quizá opte por otra carrera como la Vuelta, donde puede que ni siquiera haya una contrarreloj. Se evalúa todo, desde el tipo de etapas en general hasta el desnivel global".
Colbrelli señala lo importante que es la concentración de diciembre a la hora de planificar todo esto, ya que son los primeros momentos en los que se empiezan a trazar oficialmente los planes, se toman las decisiones sobre los calendarios de los líderes, pero también los corredores más pequeños empiezan a saber dónde van a competir. Se trata de un trabajo de organización muy importante, que viene acompañado de muchas pruebas médicas, ajustes de equipamiento y la entrega de nuevos suministros, así como, por supuesto, de la apertura a los nuevos corredores y al personal que llega.
"Cuando termina la temporada, damos a los corredores un mes de libertad absoluta, dejándoles desconectar por completo. Entonces empezamos de nuevo con las primeras sesiones de entrenamiento y los entrenadores empiezan a sondear los deseos de los chicos: los hay que quieren aspirar a las clásicas, los que al Giro o los que, tal vez, a Sanremo. Sin embargo, no se puede complacer a todo el mundo", afirma Colbrelli. "Al principio, el corredor habla con el entrenador, que recoge sus intenciones y las comunica al equipo. En diciembre, durante los campamentos, se elaboran los programas generales. En enero, en cambio, se define el calendario en detalle".
La segunda concentración de enero será quizás igual de importante, ya que en ese momento se conocerá el recorrido del Giro de Italia y de la Vuelta a España y no habrá dudas sobre qué Grandes Vueltas se adaptan mejor a cada corredor. Sin embargo, es una tarea complicada gestionar toda una variedad de corredores, 30 para ser exactos, y empezar a encajar todas las piezas del puzzle. A lo largo del año, las lesiones, las enfermedades y otras posibles complicaciones obligan constantemente a los equipos a hacer cambios en los que siempre es importante adaptarse.
"La mayor dificultad es hacer comprender a un corredor que no siempre puede seguir sus deseos. Si, por ejemplo, piensa en hacer todas las clásicas, puede que le digan que hay que sacrificar algunas carreras para llegar a lo más alto en una prueba concreta", afirma el italiano, quien asegura que en el pasado él mismo se ha visto obligado a hacer lo mismo.
"No es fácil comunicar ciertas decisiones, y se ve enseguida en su expresión cuando no está satisfecho. Y les entiendo bien, porque yo también he pasado por eso como atleta. Recuerdo que un año quise participar en la Roubaix, pero el equipo prefirió que me concentrara en otra carrera donde tenía más posibilidades de obtener resultados".
😍 Shooting day in the stunning Altea Old Town.
— Team Bahrain Victorious (@BHRVictorious) December 11, 2024
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