Simon Yates es un enamorado del Giro de Italia, pero este año ha optado por algo diferente. El
Tour de Francia, repleto de montañas, brindó al británico una gran oportunidad y también una serie de nuevos objetivos, y llega como líder del
Jayco-AlUla a la edición de 2023 de la Grande Boucle.
"Estaba preparado para un cambio. En los últimos años me he centrado principalmente en el Giro, que sigue siendo una carrera que me apasiona. Con una estructura de temporada diferente, también pude hacer carreras como el Tour de Romandía y la Vuelta al País Vasco, que también me gustan", dijo Yates a In de Leiderstrui. En Romandía tuvo que abandonar el segundo día.
Desde entonces no ha vuelto a competir. Participa en el Tour de Francia como el único aspirante a la general que llega sin correr, mientras que en el Giro de Italia, el ganador de la carrera, Primoz Roglic, adoptó la misma fórmula. "Me puse un poco enfermo durante la preparación y entonces decidimos mantenernos informados. Creíamos que un campo de entrenamiento en altitud sería la mejor preparación. Allí pude entrenarme bien y prepararme así para el Tour".
Sin embargo, llega quizás como líder secundario del Jayco-AlUla, ya que el equipo dedicó la mayor parte del tiempo de sus gregarios a apoyar a Dylan Groenewegen. Esto tiene un impacto en sus ambiciones, el británico no está seguro de si intentará luchar por un puesto fuerte en la clasificación general, o luchar por victorias de etapa y posiblemente la clasificación de la Montaña. Sin embargo, eso es algo que sólo se verá a lo largo de la carrera.
"Nos lo tomaremos como venga. Hace mucho tiempo que no voy a por una clasificación en el Tour. En cuanto lleguemos más lejos, veremos cómo evoluciono. En cualquier caso, no tendría ningún problema en perseguir otros objetivos, por ejemplo ganar etapas desde la escapada".
La salida de la carrera en el País Vasco será una de las que más le convengan, pero eso es algo positivo para el corredor de 30 años. "Estoy deseando que llegue la dura salida del País Vasco, que probablemente me quitará algo de presión. Una salida del Tour siempre es agitada, pero ahora parece ser un poco más selectiva que una salida en, digamos, Normandía o Bretaña".
"Creo que todos los escaladores tienen opciones para las dos primeras etapas. No se suele tener la opción de coger el maillot amarillo en la primera etapa del Tour, así que creo que muchos corredores serán agresivos. De todos modos, es bueno para mí. Siempre disfruto corriendo en el País Vasco, los aficionados son geniales".
"Les encanta este deporte y eso es muy agradable de ver. Mi mentalidad no difiere de la de otras grandes vueltas. Sigo concentrado, pero pasar desapercibido no tiene por qué ser una desventaja. Al contrario", concluyó.