Robert Gesink y el mazazo que se llevó por no ir al Tour de Francia: "Había renunciado a mucho por ganarlo con Jumbo-Visma"

A sus 37 años, Robert Gesink se acerca al final de su carrera. El incondicional holandés del Jumbo-Visma lleva en el equipo desde 2007 y se retirará cuando concluya la temporada 2024.

"Siempre he sido leal al equipo y nunca me he planteado seriamente cambiar de equipo", declaró Gesink en una entrevista en profundidad concedida a la revista RIDE. "La muerte de mi padre, los problemas con los trastornos del ritmo cardíaco y el hecho de que mi mujer Daisy haya luchado con su salud durante un tiempo. Esas eran las razones por las que no quería cambios en mi entorno laboral. Debido a todos los problemas de mi vida privada, quería sobre todo estabilidad y un entorno familiar en cuanto al equipo. También influyó que el equipo nunca me defraudó en esos periodos difíciles".

En sus casi dos décadas en el equipo holandés, Gesink ha desempeñado varios papeles, desde líder de Grandes Vueltas a superdoméstico y, más recientemente, capitán de ruta. Durante ese tiempo, también ha visto cómo el equipo se convertía en la fuerza dominante que es hoy en día, aunque al no haber sido seleccionado junto a Jonas Vingegaard en 2022 y 2023, la falta de una victoria en el Tour de Francia es una fuente de gran pesar para el experimentado holandés.

"El año pasado me sentí muy decepcionado por no haber formado parte del equipo que ganó el Tour de Francia con Jonas Vingegaard. Ganar el Tour con el Jumbo-Visma es un proyecto por el que también he renunciado a muchas cosas a nivel personal en los últimos años", afirma Gesink. "Esa victoria en el Tour habría sido la guinda del pastel. Fue una pena que me quedara fuera de ese equipo. Aunque también estoy orgulloso de cómo me recuperé de aquella decepción y posteriormente volví a plantar cara en la Vuelta."

Sin embargo, la esperanza de que Gesink pueda recorrer los Campos Elíseos del brazo de la Maillot Jaune no ha desaparecido del todo. "Es muy especial jugar ahora para el mejor equipo del mundo. Además, no quería despedirme de un año en el que me perdí la primavera por una caída en el Tour Down Under y en el que tuve que saltarme el Giro de Italia por una infección en la corona", concluye. "Pero lo más importante es que sigo disfrutando de verdad del ciclismo y estoy decidido a alcanzar este alto nivel."