Richie Porte es el mejor ciclista de la historia del
Tour Down Under y ahora que está retirado ha descrito a la perfección las etapas que van a decidir la carrera australiana en 2024.
Fue en un análisis para GCN, en el que Porte echó un vistazo a todas las etapas de esta edición. Sus palabras sobre la etapa 5, que terminó en la cima de la vieja colina de Willunga -que vuelve este año- son importantes, como alguien que ha triunfado allí más veces que nadie. "El posicionamiento es muy importante en la subida y hay que quemar algunas cerillas en la aproximación, pero lo que quieres es que tus compañeros de equipo, grandes y fuertes, te pongan cerca de la cabeza. Es una lucha enorme y muy agitada, con gente en la grava que intenta pasar", explica. "La primera subida se hace a ritmo, pero el ritmo aumenta en la cima".
Esta subida debería ser clave en el panorama de la carrera, por ser la más dura, pero también por tener bonificaciones en el final, que coincide con la llegada de la etapa. "La parte más dura de la subida está probablemente entre 1,2 km para el final y los 300 metros finales. Ahí es donde se gana". Sin embargo, los organizadores de la carrera han decidido este año combinar Willunga con la etapa final al Monte Lofty, que era la novedad del recorrido de 2023 y seguía ofreciendo espectáculo en el último día de carrera. En aquella ocasión, Simon Yates ganó la etapa a Jay Vine, que conquistó el maillot ocre.
"Lofty no es tan duro como Willunga -y sólo lo he hecho en los entrenamientos-, pero puedes marcar la diferencia y lo peor sería llegar al último día con una sensación de complacencia", dijo el australiano sobre la última etapa en la que terminará la carrera. "Hay que recordar que, aunque la victoria final esté asegurada, habrá corredores que lucharán por estar entre los diez primeros debido a la importancia de los puntos WorldTour. Los equipos pondrán toda la carne en el asador en esta etapa. Hay casi 3.000 metros de escalada en menos de 130 km, así que habrá acción de principio a fin".