La jornada de este jueves estuvo marcada por dos aparatosas caídas en territorio italiano y húngaro, ambas con un factor común: los corredores del equipo
Red Bull - BORA - Hansgrohe estuvieron entre los más perjudicados.
En Italia, Jai Hindley tuvo que abandonar tras verse involucrado en un incidente. Pero fue en Hungría donde el impacto fue más severo. Ryan Mullen perdió brevemente el control y salió de la carretera, lo que derivó en una caída a alta velocidad. Al reincorporarse de forma descontrolada, chocó violentamente contra el pelotón, arrastrando consigo a varios compañeros de escuadra, incluidos Sam Welsford y Frederik Wandahl.
Otros ciclistas que también se vieron obligados a retirarse inmediatamente fueron Pablo Torres (UAE Team Emirates - XRG) y Rainer Kepplinger (Bahrain - Victorious). Según los organizadores, dos ambulancias y un helicóptero acudieron al lugar para trasladar a cinco corredores al hospital, todos en estado estable. Wandahl fue quien aparentemente sufrió el impacto más fuerte.
Afortunadamente, los primeros informes médicos ofrecieron un parte tranquilizador. "Las evaluaciones iniciales indican que los tres ciclistas están estables y no presentan lesiones de gravedad. No obstante, Frederik Wandahl permanecerá en observación durante la noche", comunicó el equipo a TV 2 Sport.