Por tercera vez en su carrera,
Mathieu van der Poel participará en la
Amstel Gold Race.
Ganador en 2019, esa edición en particular es una que todavía se pega en la memoria del actual campeón del mundo. "Por supuesto que me gusta volver a la Amstel. Mi victoria en 2019 en particular es una que nunca olvidaré", reflexiona van der Poel a través de un comunicado de prensa de su equipo
Alpecin-Deceuninck antes de la edición de este año de la carrera.
"El espectacular final sigue atrayendo la imaginación, además de ser mi primera gran victoria en la carretera. Son recuerdos que uno atesora", prosigue van der Poel. "El hecho de que terminara cuarto en 2022 demuestra que me gusta la carrera en las colinas del Limburgo neerlandés. Es una especie de mini Vuelta a Flandes, con muchas curvas y pendientes pronunciadas, pero sin adoquines."
Van der Poel, que parte como gran favorito, se centrará únicamente en sí mismo. Aún no he mirado la lista de salida. Suena a tópico, pero confío sobre todo en mis fuerzas y en las del equipo. Hemos demostrado en las últimas semanas que como equipo podemos tomar el control cuando es necesario", concluye. "También estaré bien rodeado el domingo, con chicos que han demostrado todos ellos que están en buena forma. Además, estamos en la buena dinámica. Sí, creo que podemos viajar a Maastricht con confianza".