El analista de El Contraanálisis Christian Josimar comentaba en un artículo publicado recientemente que
Movistar Team podría poner sus ojos en
Thymen Arensman por el mal rollo que tiene dentro de
INEOS Grenadiers y hoy ha vuelto a ponerse de manifiesto.
Durante la última subida de ayer dejó a su compañero
Geraint Thomas atrás y, pese a que comentó en la previa de la etapa 17 que el gran objetivo del equipo es el podium de G, lo cierto es que su compañero galés no se tomó nada bien que no siguiera con él en la cima.
Cuando Eurosport le preguntó antes de la salida de la 17ª etapa, el miércoles por la mañana, si había dado o no a su joven compañero de equipo el visto bueno para luchar por sí mismo en la subida final, "No", Thomas respondió tajante pero firmemente. "Hubiera sido mejor que Thymen hubiera esperado, pero aún así. Era una subida tan corta que sólo me llevó unos minutos. De todas formas, no habría habido mucha diferencia. Sólo fueron unos segundos".
Sin embargo, tras haber perdido tiempo y encontrarse ahora a la zaga en la carrera por el segundo puesto, Thomas podría estar dispuesto a demostrar su valía en otra jornada montañosa en la etapa 17. "Me siento mejor ahora que ayer. Espero que las cosas vuelvan a mejorar. Si hay una oportunidad de recuperar el segundo puesto en la general, lo intentaré", concluye el corredor de 37 años. "Si las piernas están bien, quiero atacar. Pero es más fácil decirlo que hacerlo".
Arensman, por su parte, comienza el día sexto en la clasificación general, a sólo 24 segundos de Antonio Tiberi en la carrera por el maillot blanco en la clasificación de mejor joven ciclista. Aunque la Maglia Rosa está completamente fuera de su alcance salvo milagro, los granaderos del INEOS todavía tienen mucho por lo que luchar en una Gran Vuelta en la que ya han conseguido un par de victorias de etapa.