Mauro Schmid, sobre los rumores de su viaje a Las Vegas y el enfado de Lefevere: "Le gusta poner un poco de fuego"

Las noticias del sábado estallaron con una historia insólita, la de Mauro Schmid habiendo mentido sobre la avería de su Garmin como tapadera de un viaje de seis días a Las Vegas tras el Mundial de Glasgow. El Soudal Quick-Step ha reaccionado rápidamente a las acusaciones de Patrick Lefevere y ha corregido varios fallos en la historia contada por su jefe.

"Al final era verdad. Estuve en Las Vegas, pero cuando dijo que estuve fuera seis días, sólo fueron tres. Fue un viaje corto. En realidad no afectó a mi preparación ni a mi entrenamiento", declaró Schmid a GCN tras las acusaciones de esta mañana. "Por supuesto que no fue lo mejor, y estoy de acuerdo con ello, pero después del Mundial había tenido una temporada dura y estaba cansado, así que tenía que poner la cabeza a punto para la parte final de la temporada. Estaba previsto que entrenara los tres días, pero mi bicicleta no llegó, así que sólo pude hacer una salida. El jetlag no era lo ideal, pero hay que tener la cabeza a punto y la temporada es larga, así que es normal desconectar. Empecé en enero y terminé en octubre, la temporada es larga".

La falta de comunicación llevó a la confusión sobre el paradero del corredor suizo días después de haber terminado 13º en Glasgow. Después de haber publicado en Twitter un recorrido de Strava que ahora compartía, la historia se volvió más confusa. Pero ya ha aclarado que hubo errores por ambas partes, y que la información fue obtenida por Lefevere, quien afirmó que estuvo en EE.UU. seis días, no tres como dice ahora Schmid, y comentó que su Garmin no funcionaba cuando el ciclista suizo señala que eso no es cierto.

"Al final sé cómo es Patrick y he visto las otras historias que han salido en las noticias en los últimos meses sobre otros pilotos, pero la verdad es que no me importa", continuó el corredor de 23 años, que se pasa al Jayco-AlUla. "No tengo una mala relación con Patrick, sigo estando súper contento de estar en el equipo. A él también le gusta ponerle un poco de fuego. Yo estaba allí, claro, pero mi Garmin no estaba roto. Nunca dije eso. Simplemente no lo comuniqué. Por mi parte todo está súper bien con Patrick. Estoy contento de estar aquí y estaré orgulloso de llevar el maillot hasta el último día de la temporada".