En la cuarta etapa de la
Vuelta a Suiza,
Mattias Skjelmose terminó tercero a más de un minuto del ganador Felix Gall. El corredor del
Trek-Segafredo perdió su maillot de líder en favor del austriaco por tan sólo dos segundos, lo que le sitúa en una muy buena posición de cara a los próximos días.
El líder del Trek-Segafredo pierde su maillot amarillo, pero dice que no está triste por ello. "Cuando Felix Gall nos adelantó, esperaba perder el maillot de líder por el menor margen posible. Y eso es lo que ha pasado, así que ha sido un día exitoso".
Skjelmose tampoco ha intentado recuperar al austriaco. Afortunadamente para él, otros estaban dispuestos a hacer el trabajo sucio. "Intenté ir con calma a la persecución. En ese momento ya no teníamos el equipo para controlar, pero por suerte otros chicos querían correr. Así que pude seguirles la mayor parte del tiempo. Así gasté muy poca energía".
"No era el plan a toda costa perder hoy el maillot amarillo, pero tampoco me iba a dejar la piel para conservarlo. Mañana es mucho más importante y puedo marcar una diferencia mayor que hoy. Queríamos perder el maillot en favor de alguien a quien pudiera controlar en la contrarreloj. Felix Gall parece fuerte, pero creo que puedo ganarle", concluye Skjelmose con confianza.