La Paris-Roubaix de este domingo será testigo de la última entrega de la siempre emocionante rivalidad entre
Mathieu van der Poel y
Wout van Aert. Sin embargo, el holandés no ve a su rival belga como uno de los favoritos antes de la carrera.
"Ya me sentí bastante bien en el
Tour de Flandes y la Scheldeprijs. El Tour me va mejor que Roubaix, pero si tengo las mismas piernas, debería poder competir por la victoria", dice van der Poel, aunque duda de si van Aert estará o no al mismo nivel. "Está claro que no es el máximo favorito absoluto".
Van der Poel, del
Alpecin-Deceuninck, terminó segundo en el Tour de Flandes el pasado fin de semana, mientras que van Aert tuvo que conformarse con el cuarto puesto, ¿podría esto tener algún impacto en el resultado de la
París-Roubaix? "Uno podría haber sido un poco mejor que el otro la semana pasada, pero esto es un juego diferente", explica van der Poel. "En Roubaix hay algunos aspirantes más, porque hay un poco de suerte. Sin embargo, son los nombres que todo el mundo espera: Filippo Ganna, Stefan Küng, Mads Pedersen, Kasper Asgreen e Yves Lampaert también vienen inmediatamente a la mente. Pero hay más corredores que pueden ganar la carrera".
"La gente a veces lo olvida, pero nuestra temporada es muy larga. Por ejemplo, desde el Mundial de ciclocross hasta Roubaix hay un bloque", prosigue antes de aludir a su próximo gran objetivo tras Roubaix, la Vuelta a Suiza. "Todo esto para estar al máximo para Suizaalpec, el siguiente gran objetivo después de Roubaix".