Angelo Citracca y Luca Scinto se enfrentarán a juicio por presunta extorsión tras una investigación de cuatro años sobre un supuesto sistema de “pago por correr” en el equipo Vini Zabù, que cerró en 2021 tras una serie de casos de dopaje.
La investigación comenzó ese mismo año después de que Matteo De Bonis diera positivo por EPO, lo que derivó en una suspensión de 30 días, ya que era el segundo caso de dopaje del equipo en un periodo de doce meses. Ante esta situación, Vini Zabù devolvió su invitación al Giro de Italia y puso en marcha una campaña de crowdfunding para financiar protocolos antidopaje no especificados, recaudando un total de 339 €. Finalmente, el equipo cerró tras 13 años en el pelotón profesional.
La unidad NAS de la policía italiana centró inicialmente la investigación en delitos relacionados con el dopaje, pero amplió su alcance cuando los ciclistas denunciaron haber sido obligados a devolver parte de sus salarios a la dirección del equipo para poder competir.
Según informa La Nazione, los corredores denunciaron “fuerte presión psicológica y prácticas de acoso por parte de la dirección para inducirles a devolver parte de sus salarios”. Tras una audiencia preliminar en Pistoia, Citracca, exdirector del equipo, ha sido imputado por extorsión contra un ciclista y tentativa de extorsión contra la esposa del deportista y otro corredor.
Implicaciones de Scinto y otros miembros
El director deportivo principal, Luca Scinto —actualmente al frente del equipo junior Franco Ballerini Lucchini Energy— ha sido imputado por extorsión junto a Citracca y por receptación de bienes robados. Según La Nazione, poseía documentos sellados por la autoridad sanitaria local “que supuestamente utilizaba para tramitar solicitudes médicas de sustancias dopantes”. Davide Del Sarto, exdirector deportivo de De Bonis, también ha sido imputado por tentativa de extorsión junto a Citracca.
Scinto y seis corredores del equipo Vini Zabù fueron absueltos de cargos por dopaje durante una carrera en Dubái debido a la inadmisibilidad de las pruebas, mientras que otro cargo de dopaje quedó bajo la jurisdicción de los fiscales de Forlì. Citracca ya había sido suspendido tres meses en 2017 tras ser hallado culpable por la Federación Italiana de Ciclismo de cobrar a los ciclistas por competir con su equipo, cargo que él siempre negó.
El problema de los sistemas de “pago por correr” en el ciclismo italiano fue denunciado en una serie de artículos en Il Corriere della Sera por el periodista Marco Bonarrigo, con testimonios de ciclistas como Elia Viviani. El juicio contra Scinto, Citracca y Del Sarto está programado para comenzar el 22 de mayo de 2026.
Elia Viviani será uno de los ciclistas que den su testimonio