A sus 19 años,
Paul Seixas ya es considerado una de las mayores promesas del ciclismo mundial. El joven escalador del
Decathlon AG2R La Mondiale ha completado una temporada de debut en el WorldTour que pocos habrían imaginado: madura, consistente y con destellos de clase que hacen soñar a toda Francia con el final de un ayuno de cuatro décadas sin un ganador nacional en el Tour de Francia.
Tras un brillante paso por la categoría junior, Seixas ya apuntaba alto. Pero su primer año como profesional superó incluso las expectativas más optimistas.
Después de un inicio tranquilo, el joven francés deslumbró en el Critérium du Dauphiné, donde terminó octavo en la clasificación general, compitiendo de tú a tú con los mejores escaladores del pelotón.
Su progresión continuó durante el verano con una actuación memorable en el Tour del Porvenir, donde se llevó la victoria general, confirmando su estatus de futuro líder de Grandes Vueltas. Poco después, sorprendió nuevamente en los Campeonatos del Mundo de Ruanda, donde, siendo el más joven en la categoría élite, firmó un 13º puesto frente a rivales consagrados.
Y por si quedaban dudas, su cierre de temporada fue de película: 3º en el Campeonato de Europa de Ardeche, sólo superado por Tadej Pogacar y Remco Evenepoel, y 7º en Il Lombardia, demostrando su temple y brillantez en la montaña. “Su último tramo de 2025 fue simplemente sobresaliente”, comentan desde el equipo. “Mostró el tipo de rendimiento que define a los grandes”.
Desde Hinault, Francia espera un nuevo héroe que conquiste el Tour. Seixas parece reunir los ingredientes: capacidad de escalada, resistencia, mentalidad competitiva y una sorprendente madurez táctica. Sin embargo, tanto el corredor como su entorno insisten en la paciencia. El director de rendimiento del Decathlon, Jean-Baptiste Quiclet, explicó en
Vélo Magazine:
“Sin andarse con rodeos, todos los escenarios son posibles. Podría hacer una temporada sin Gran Vuelta, o podría competir en el Giro, el Tour o la Vuelta. Dependerá del calendario y de qué opciones nos den más oportunidades de aprendizaje”. El enfoque del equipo es claro: formar a Seixas paso a paso, sin precipitar su salto al Tour de Francia.
Paul Seixas es el futuro del ciclismo francés
Un talento polivalente que no se limita a las Grandes Vueltas
Aunque muchos ya lo imaginan escalando los Alpes y los Pirineos de amarillo, Seixas ha demostrado una versatilidad poco común. Su rendimiento en Kigali y Ardeche evidencia que también puede brillar en clásicas de un día y Monumentos.
“Varios proyectos chocan: carreras de un día, grandes campeonatos y Grandes Vueltas”, explicó Quiclet.
“Tendrá que elegir bien sus batallas. Lo importante es no romper el impulso positivo, porque cada mes vemos a un nuevo Paul”.
El cuerpo técnico busca equilibrar su calendario para potenciar sus puntos fuertes sin quemar etapas. En el horizonte cercano, Francia también cuenta con Lenny Martínez (Bahrain–Victorious), otro joven talento enfocado en la clasificación general. Pero mientras Martínez aún busca constancia, Seixas parece más precoz, más completo y con un potencial más definido.
Quiclet lo resume así: “Hay dos caminos posibles. Uno es el del ‘proyecto Martínez’, con libertad temprana en las Grandes Vueltas. El otro es un proceso más estructurado, orientado a construir las habilidades de un líder a lo largo del tiempo.
Lo que importa no es proteger a Paul de la presión, sino ayudarle a gestionar su propio camino hacia la victoria.”