La
Vuelta a España 2025 ha llegado a su último día de descanso, y lo ha hecho con las protestas contra Israel en el foco mediático prácticamente desde su inicio. La participación del equipo
Israel - Premier Tech no ha pasado desapercibida. En prácticamente todas las etapas se han producido manifestaciones de grupos propalestina.
Hasta ahora, los protestantes han conseguido que su lucha haga mella en la Vuelta a España. Primero fue con la presencia de varias personas en la crono por equipos de la etapa 5, que pararon a los corredores de Israel - Premier Tech.
Luego se produjo la suspensión del final de la etapa de Bilbao, cuando
Jonas Vingegaard y Tom Pidcock se iban a disputar la victoria mano a mano. Una enorme manifestación en meta provocó que no hubiese ganador aquel día, y que se tomaran tiempos a 3 kilómetros del final.
También se produjo un parón en la etapa del Angliru. Cuando la fuga entró en la mítica subida final, tuvo que frenarse unos 30 segundos a causa de la presencia de varios manifestantes en la carretera. El último caso afectó físicamente a Javier Romo, de Movistar Team, cuando un manifestante quiso entrar en la carretera en la etapa 15, y un policía tuvo que cruzar la calzada.
Por todo esto, se llegó a rumorear que el final de la Vuelta a España 2025 en Madrid se iba a suspender. Debido a que se esperaban manifestaciones masivas, la organización habría tomado la decisión de no llegar a la capital. Pero eso se ha desmentido por los propios organizadores.
El domingo, L'Équipe informó de que la etapa 21 corría peligro, ya que se esperaba que las manifestaciones en Madrid fueran más numerosas que en etapas anteriores. Pero el director de la Vuelta, Javier Guillén, ha rechazado firmemente esa posibilidad, al tiempo que ha abordado los peligros que plantean las recientes protestas que han tenido lugar durante la gran vuelta española.
La Vuelta a España no suspenderá su final en Madrid
"Queremos aclarar que la organización de la Vuelta a España desmiente las informaciones que apuntan a una posible cancelación de la etapa 21", empezó señalando.
"Ya estamos viendo las consecuencias: causan daños corporales a los ciclistas. Esto no sólo pone en peligro la seguridad de los propios ciclistas, sino también la del público y la de la persona que lleva a cabo la acción. Por eso debemos hacer un llamamiento para que esto no vuelva a ocurrir", dijo Guillén.
"Vemos lo que está pasando y, por supuesto, reafirmamos el derecho de todos a la expresión pacífica durante la Vuelta. No podemos tolerar este tipo de invasiones u otras acciones que ponen en peligro la seguridad de los corredores, que simplemente quieren correr y hacerlo en circunstancias completamente normales. Estamos haciendo todo lo posible para garantizarlo".
"Por supuesto, estamos trabajando con las fuerzas de seguridad del Estado para conseguir evitar percances, a las que siempre expresamos nuestro agradecimiento por toda la ayuda que nos prestan, cuyo único objetivo es proteger a los corredores y garantizar que puedan rodar con normalidad".
La etapa de Valladolid, en el foco
La jornada que sí que preocupa a la organización es la contrarreloj individual de Valladolid. Aunque hay más policía que antes, controlar toda la carretera y todas las participaciones es tarea más complicada que en una etapa normal. Veremos qué ocurre finalmente en la semana final de Vuelta a España.