El descenso de Olaeta dejó graves consecuencias tanto en la
Itzulia como en numerosos corredores, entre ellos los principales favoritos como Jonas Vingegaard, Primoz Roglic o Remco Evenepoel. El esloveno no ha sufrido ninguna rotura pero los otros dos fueras de serie tendrán que modificar el calendario que tenían previsto, y para ambos peligra el Tour de Francia.
Jens Voigt fue un corredor que tuvo su buena ración de caídas a lo largo de sus 18 años de carrera, incluida una terrible caída en el descenso del Col du Petit Saint Bernard en la 16ª etapa del Tour de Francia de 2009.
En una entrevista concedida a Eurosport, el ex ciclista alemán afirmó que "me hizo pensar en la violenta caída de Richie Porte en el Tour de Francia 2017. La forma en que Vingegaard fue arrastrado fue dramática. Una caída cuesta abajo suele tener consecuencias graves. Por eso rápidamente se vio que estaba mal. También espero ansiosamente noticias y actualizaciones sobre la salud de los ciclistas".
Sobre las causas del accidente, Voigt dijo que "al principio me resultaba incomprensible que una caída así pudiera ocurrir allí. Hacía un sol maravilloso, la carretera estaba seca y era relativamente ancha, no era una curva cerrada, sino una curva normal de la carretera. Por eso me sorprendió. Debían de ocurrir muchas cosas desafortunadas allí. Uno resbala, otro choca, los demás entran en pánico y frenan demasiado fuerte. Mikel Bizkarra ha dicho que las raíces de los árboles pueden estar levantando el firme".
Muchos criticaron el hecho de que no hubiera nada para frenar la caída de un piloto en una curva peligrosa, pero Voigt considera que estas críticas no son válidas, ya que dijo que "nadie esperaba que se produjera un accidente en este punto. Posiblemente se podría haber asegurado con un fardo de heno o algo similar. Pero no, en este caso no culpo al organizador. Realmente no se podía haber evitado".