"Intenta ser un poco más feliz, eso también te hará ir más rápido": El consejo de Tom Dumoulin a Thymen Arensman

Tras una decepcionante y muy exigente temporada 2024, Thymen Arensman regresó más fuerte en 2025. El neerlandés firmó su mejor campaña, con dos victorias de etapa en el Tour de Francia y actuaciones muy sólidas durante todo el año.

El talento de Arensman era evidente desde junior. Tras finalizar segundo por detrás de Tadej Pogacar en el Tour del Porvenir 2018, en Países Bajos crecieron rápido las expectativas de que podía convertirse en aspirante a grandes vueltas. La presión sobre sus hombros fue enorme y empezó a pasar factura.

“Es algo que se fue acumulando en los últimos años”, explicó Arensman en una entrevista con Wieler Flits. “En mis primeros años como profesional, en 2020 y 2021, todo era súper nuevo y no sentía ni recibía ninguna presión del equipo. Pero en 2021 mostré mucho potencial y cada vez más me señalaron como líder. Entonces tienes que empezar a correr por la general.”

Admitió que la presión venía sobre todo de dentro. “Intenté empujarme, porque piensas que eso te mejora y que es bueno para ti. En mi caso también es un tema de personalidad. Siempre he tenido esa tendencia a hacer un poco más de lo que marcaba el plan de entrenamiento, pero en 2024 se volvió realmente extremo. En algún momento tienes que darte el golpe para poder volver.”

Un punto de inflexión crucial llegó tras conversaciones con Tom Dumoulin, con quien Arensman habló a principios de este año sobre el aspecto mental del deporte. Dumoulin siempre ha sido increíblemente abierto sobre sus problemas de salud mental.

“Saqué mucho de ese encuentro con Tom”, dijo Arensman. “Obviamente escuchaste todo en el pódcast, pero en nuestras conversaciones sin micrófonos Tom también compartió mucho. Y quiere seguir haciéndolo, puedo llamarlo cuando quiera. Lo hice durante la Volta ao Algarve cuando las cosas empezaron a ir un poco peor otra vez.”

Ambos han atravesado situaciones muy similares, lo que facilita que se entiendan. “Tom y yo básicamente hemos pasado por lo mismo. Tom también dice: todo el mundo intenta constantemente demostrarse y llevar al mercado la siguiente ganancia marginal, pero puedes perderte por completo en eso. Intenta ser un poco más feliz, eso también te hará ir más rápido.”

Esa filosofía ha marcado el enfoque de Arensman en 2025, con cambios en la intensidad del entrenamiento. “En enero, sinceramente, estuve muy tranquilo en la concentración en altura en Tenerife. Creo que me descolgaron casi cada día en la subida final, y no me importaba si alguien se iba más rápido.”

“Normalmente eso siempre me estresaría, sobre todo si veía que mis vatios estaban por debajo de lo previsto. Ahora confío en que llegará en carrera, que podré sacar esos 50 o 100 vatios extra cuando realmente importe.”

Arensman también ha simplificado su enfoque de la nutrición, en su caso a contracorriente de lo que suelen hacer los profesionales hoy. “Desde el inicio de 2025 ya no trabajo con un nutricionista. Quizá con un nutricionista sigues el plan ideal, pero a mí no me funcionó. Como lo que quiero y escucho a mi cuerpo. He aprendido lo suficiente sobre nutrición en los últimos años como para tener una base. No es ciencia de cohetes.”

“Sabes cuántos carbohidratos por hora necesitas, y también es evidente que debes comer menos en un día de descanso que en uno con seis horas de entrenamiento. Es pensar con lógica y escuchar cómo me siento.”

Algunos pequeños cambios le han dado verdadera tranquilidad. “Si me apetece un trozo de chocolate: bien. Hoy elijo chocolate negro en lugar de con leche. Antes lo habría evitado del todo. Pero el hecho de no comerlo conscientemente me acababa costando casi más energía que si me hubiera metido ese trozo de chocolate en la boca.”