"Hay muchísimas limitaciones": El campeón del mundo de E-Sports, sobre por qué no quiere volver al WorldTour

En el ciclismo, la disciplina de E-Sports está ganando cada año mucha más relevancia. Mucha culpa de ello la tiene Jason Osborne, actual campeón del mundo. A sus 31 años, el alemán ha encontrado la felicidad en la soledad de este tipo de competición, mientras que no considera un regreso al WorldTour (la carretera) por motivos similares.

Osborne ha hablado recientemente de los problemas que afronta actualmente el ciclismo indoor en materia de dopaje, pero en una entrevista reciente también ha explicado que en esta disciplina logra sus mejores números. Probó el WorldTour con Alpecin-Deceuninck, aunque no encontró un entorno óptimo para rendir y prioriza la independencia.

Osborne ganó por primera vez el Mundial de E‑Sports en 2020 y la temporada siguiente corrió como stagiaire con Alpecin-Deceuninck. Se mantuvo vinculado hasta 2024, intentando durante varios años explotar su potencial en carretera, sin conseguirlo. Logró algunos resultados decentes al máximo nivel, pero nunca pudo acercarse al mismo grado de éxito que en la competición indoor.

“Había demasiadas limitaciones. No podía alcanzar todo mi potencial porque los equipos funcionaban de forma demasiado centralizada”, dijo el alemán en palabras a Marca.

“Entrenamientos, métodos, decisiones… todo estaba controlado. No había espacio para la individualidad.” Es la exigencia de profesionalismo en la élite, pero no todos los ciclistas se adaptan, especialmente Osborne, que se formó en esta disciplina tras ser medallista olímpico en remo antes de profesionalizarse en ciclismo.

“Mis números son los mejores de mi vida, mejores que cuando corría en carretera. Es un poco triste, porque con estos números podría haber logrado grandes cosas en carretera, pero nunca tuve la oportunidad de desarrollarlos.” Desde que dejó el pelotón profesional ha ganado de nuevo los Mundiales de E‑Sports 2024 y 2025, ampliando su palmarés.

El corredor de 31 años es un caso atípico en el pelotón y ha terminado encontrando su sitio en un entorno más individualista. El ciclismo indoor, cosas del destino, lo permite.

“Esta flexibilidad lo cambia todo. El ciclismo indoor me permite competir en cualquier lugar: solo necesito un rodillo, un iPad y mi bici. En el ciclismo virtual, todo depende de ti. He redescubierto la satisfacción que había perdido en la carretera.”

A partir de 2027, los resultados en ciclocross, BTT y pista otorgarán puntos UCI a los equipos de carretera. Es posible que en algún momento ocurra lo mismo con los E‑Sports, o que la disciplina gane más notoriedad y, con ello, también sus especialistas más destacados, como Osborne.

“Habrá una transición hacia atletas híbridos, con estructuras más individualizadas y menos dependencia del equipo”, sostiene, una tendencia que quizá ya haya empezado. “Más libertad y menos estrés. Este es el camino a seguir.”