El ciclismo francés se prepara para despedir a uno de sus más grandes exponentes de las últimas décadas.
Arnaud Démare, el velocista más laureado del país en el siglo XXI, ha anunciado este jueves a través de sus redes sociales que colgará la bicicleta tras disputar la clásica Paris-Tours este domingo.
Con 34 años y 97 victorias profesionales a sus espaldas, el corredor del equipo Arkéa - B&B Hotels cerrará una carrera marcada por la constancia, el poderío en el sprint y una colección de títulos envidiable.
"Ha llegado la hora. Al final de esta temporada, después de Paris-Tours, pasaré página en mi carrera profesional", escribió Démare en su cuenta de
X (antes Twitter). "He tenido la suerte de vivir mi sueño, de ganar grandes carreras y representar con orgullo al ciclismo francés al más alto nivel".
Desde su debut profesional en 2011 con la estructura FDJ (hoy Groupama - FDJ), Démare ha cosechado triunfos emblemáticos. Su victoria más recordada llegó en 2016 en la Milán-San Remo, una de las clásicas más prestigiosas del calendario internacional.
También conquistó dos etapas en el Tour de Francia (2017 y 2018) y se coronó ocho veces en el Giro de Italia, donde además se adjudicó en dos ocasiones el maillot ciclamino al mejor velocista (2020 y 2022).
Triple campeón de Francia (2014, 2017 y 2020), su nombre ha quedado inscrito entre los grandes del ciclismo nacional. Con 97 victorias, Démare es actualmente el tercer ciclista en activo con más triunfos, solo por detrás del esloveno Tadej Pogacar (107) y del noruego Alexander Kristoff (98), quien también anunció recientemente su retirada.
Un final agridulce
El cierre de su carrera se da en un contexto complicado. Tras su polémica salida del equipo Groupama - FDJ en 2023, donde militó durante doce temporadas, Démare se unió al conjunto Arkéa- B&B Hotels, dirigido por Emmanuel Hubert.
Arnaud Démare, uno de los mejores ciclistas franceses de su generación
Su despedida de la formación de Marc Madiot estuvo marcada por tensiones internas. "Estoy realmente decepcionado, especialmente cuando pienso en todo lo que aporté a ese equipo", declaró entonces.
En su nueva escuadra, sin embargo, no ha podido brillar como en el pasado. Esta última temporada ha sido la primera en su trayectoria profesional sin victorias, en un equipo que además atraviesa una grave crisis institucional y financiera, con el riesgo latente de desaparición al final de año.
Démare buscará este domingo una despedida digna en Paris-Tours, una prueba que conoce bien y en la que ya se impuso en dos ocasiones, en 2021 y 2022. Sería el broche de oro para alcanzar las 98 victorias, un número simbólico que, aunque no redondea la ansiada cifra de 100, consolida su legado como uno de los mejores velocistas del mundo de su generación.