Este sábado, 2 de agosto, se reanudó la competición World Tour por primera vez tras el pasado Tour de Francia. Lo hizo con la mítica
Clásica de San Sebastián 2025. En la 44ª edición de la impresionante carrera de un día, se esperaba una lucha brutal de inicio a fin por la victoria. Los principales favoritos para la victoria eran
Juan Ayuso e
Isaac del Toro. El temible dúo de UAE Team Emirates XRG se reencontraba por primera vez tras el Giro de Italia, y en frente iban a tener rivales de la talla de Oscar Onley, Giulio Ciccone o un
Primoz Roglic que entró a última hora en la selección.
La carrera, como se esperaba, estalló en Erlaitz. Mientras Ayuso decepcionaba quedándose muy pronto, Del Toro se marchó junto a Ciccone para pelear por la victoria, con un ataque a más de 40 kilómetros de meta. Pero en la subida final a Murgil, cuando Jan Christen atacó, Del Toro se quedó, y el suizo también con un contraataque mágico de Giulio Ciccone, que logró la mayor victoria de su carrera.
Respecto a su desarrollo, la Clásica de San Sebastián (también conocida como Donostiako Klasikoa) comenzó con un ataque de 12 ciclistas muy temprano. Kern Pharma, Caja Rural - Seguros RGA, Euskaltel Euskadi y Burgos Burpellet BH consiguieron meterse en la fuga del día gracias a Mats Wenzel, Julen Arriola-Bengoa, Gotzon Martín y Josh Burnett, respectivamente.
Además, en el grupo en cabeza entraron otros ciclistas de la talla de Ben Swift (de INEOS Grenadiers), Paul Double (de Jayco AlUla), Jordan Labrosse (de Decathlon AG2R La Mondiale) o Gil Gelders (de Soudal Quick-Step).
La escapada de 12 ciclistas se confirmó a 198 kilómetros de meta, cuando superaron por primera vez el minuto de ventaja respecto al pelotón, donde estaban los favoritos (Del Toro, Ayuso, Roglic...). La diferencia aumentó rápidamente a 2 minutos y 15 segundos, en el inicio de la subida al Alto de Andazarrate, a 185 km de meta.
Sin embargo, ese tiempo fue el más alto que tuvieron los escapados en toda la carrera. UAE Team Emirates XRG y Tudor Pro Cycling Team se encargaron de asumir el ritmo en el pelotón, y fueron controlando a la fuga con el paso de los kilómetros.
UAE aceleró el ritmo para Juan Ayuso e Isaac del Toro
En el paso por las subidas consecutivas a Urraki y Alkiza, donde se sobrepasó el ecuador de la Clásica de San Sebastián, el grupo principal mantuvo a los fugados a 1 minuto y medio de distancia, aproximadamente.
La carrera estalla en Jaizkibel
A partir de este momento, comenzó a acercarse el tramo decisivo de la Donostiako Klasikoa. Primero iba a llegar el Alto de Jaizkibel, pero antes Juan Ayuso sufrió un pequeño contratiempo, a 80 km de meta, al lidiar con un pinchazo en una de las ruedas de su bicicleta.
Al pie de la subida, la fuga empezó a ascender con una ventaja inferior al minuto y medio, consciente de que sus oportunidades ya eran mínimas. Por ese motivo, Darren van Bekum, de XDS Astana Team, que también estaba en la fuga, decidió ser el primer ciclista en atacar en plena subida.
Tras el movimiento, van Bekum no pudo soportar mucho más el ritmo en cabeza, y se quedó en un grupo perseguidor con Mats Wenzel, a 15 segundos del nuevo líder, Jordan Labrosse. Por detrás, el primer ciclista en moverse del pelotón fue Luke Plapp, que aprovechó que Paul Double se había metido en la fuga del día para unirse a su compañero en otro grupo perseguidor.
Tras coronar la ascensión, la situación se aclaró con el liderato en solitario de Labrosse, siguiéndole de cerca tanto Plapp como Wenzel. Por detrás, el pelotón estaba a 1 minuto y medio, pero todavía quedaba mucha carrera y a la vista estaba la ascensión más dura de todas: Erlaitz (3,8 km al 10,6% de pendiente media).
Antes del inicio de la subida, Luke Plapp y Mats Wenzel se unieron a Jordan Labrosse en cabeza de carrera. Por detrás, el pelotón empezaba a apretar con el trabajo al frente de Groupama, Bahrain y Lidl-Trek.
Del Toro no falla, pero Ayuso sí
Como se esperaba, Erlaitz fue brutal desde el inicio. Primoz Roglic empezó muy fuerte con un ataque que ya empezó a seleccionar el grupo de favoritos. Junto al esloveno fueron a su rueda Isaac del Toro, Giulio Ciccone, Jan Christen y Maxim van Gils.
Tras múltiples ataques, en el kilómetro final de la ascensión la cabeza de carrera ya estaba formada por Isaac del Toro, Giulio Ciccone, Primoz Roglic, Maxim van Gils, Jan Christen y Luke Plapp. Pero no iba a durar mucho más así.
Mientras que Juan Ayuso decepcionaba quedándose muy pronto durante la subida, demostrando que está aún lejos de un nivel adecuado para la Vuelta a España, Del Toro no falló y lanzó un ataque brutal casi en lo más alto del puerto, que le dejó en cabeza únicamente con Ciccone.
A 34 km de meta, en pleno descenso de Erlaitz, la ventaja de Isaac del Toro y Giulio Ciccone ya estaba casi en 40 segundos sobre un grupo perseguidor con Van Gils, Christen, Roglic, Benoot, Uijtdebroeks...
La exhibición de los 2 ciclistas en cabeza estaba siendo espectacular, pero no podían confiarse todavía, ni mucho menos. Aún quedaba por delante el desafío de
Murgil-Tontorra, una corta pero explosiva subida de 2,1 km al 10,1% que apareció en escena antes de la llegada a meta.
Y, como se avisaba, la ascensión se hizo larga, pero a Isaac del Toro. Seguramente, el mexicano pidiese a UAE por radio que atacara Jan Christen en el grupo perseguidor, que tenía mejores piernas. El suizo se lanzó al ataque, pero lo que no se esperaba el equipo emiratí fue el estacazo de Ciccone, que dejó atrás a sus dos corredores para marcharse en solitario a por la mayor victoria de su vida.