Gal Glivar, joven esloveno de 22 años que acaba de firmar por el Alpecin, ha pasado por el UAE Team Emirates sin poder llegar a correr junto a su compatriota Tadej Pogacar.
En las dos últimas campañas ha pasado por la estructura emiratí pero sin oportunidades. Ha corrido este año en el UAE Gen Z y, pese a un tercer puesto en Il Lombardia sub 23, por ejemplo, tenía las puertas capadas al primer equipo y ha acabado firmando 2 años por la escuadra de Mathieu van der Poel.
«En realidad es muy sencillo. No estábamos en la misma página debido al contrato. No tanto por la situación económica, sino por las oportunidades de correr y mejorar».
«Ha sido divertido correr con el maillot del UAE y apoyar a mis compañeros. Hacerlo lo mejor posible y luego ganar la carrera es algo especial y bonito, sobre todo en el WorldTour. Siempre he estado disponible, pero apenas he tenido espacio para correr», comentaba eso sí sobre su experencia en UAE.
Se ve así mismo como un clasicómano, así que no se compara con Pogacar cuando le preguntan:
«Si tuviera que compararme con alguien, diría que en cuanto a características me parezco a Tom Pidcock».
Está emocionado por su nueva aventura en Alpecin:
«Son los ciclistas más fuertes del mundo, pero yo quiero competir con ellos y crecer. El comienzo de la temporada será un poco más tranquilo, con carreras que no sean demasiado exigentes para cogerle el tranquillo a todo. Para el tipo de corredor que soy, habrá grandes oportunidades y creo que podré aprovecharlas al máximo, también porque habrá más espacio en Alpecin».
«Creo que es un equipo que se dedica realmente a un determinado tipo de carreras, con dos o tres corredores por encima del resto: Van der Poel, Jasper Philipsen y Kaden Groves. Pero, por otro lado, no hay muchas superestrellas y por eso existe el espacio adecuado para que nosotros, los jóvenes, crezcamos y tengamos nuestras oportunidades», finalizaba explicando.