"Es una de las carreras que más desea": Pogacar fija la París-Roubaix como prioridad en 2026

En la temporada 2026 que se avecina, Tadej Pogacar irá a por unas carreras muy concretas. Las dos que más obsesionan al esloveno son la París-Roubaix y la Milán-San Remo. Su predilección por los monumentos no es una novedad. De hecho, al líder de UAE Team Emirates XRG se le ve más feliz corriendo grandes clásicas que carreras como el Tour de Francia.

Roubaix y San Remo son los dos monumentos que Pogacar aún no ha ganado en su carrera y, potencialmente, sus mayores objetivos pendientes. UAE irá con todo para ganar ambos y presenta un bloque muy sólido a su alrededor, con un Tim Wellens que compite al mejor nivel de su trayectoria.

El veterano se proclamó campeón nacional de Bélgica a principios de verano y, además de ejercer como mano derecha de Pogacar en el Tour, se anotó una victoria de etapa desde la fuga en Carcasona.

“Puedo lucir ese precioso maillot belga todos los días en los entrenamientos, así que ha sido un año magnífico”, declara Wellens a In de Leiderstrui. “No ha cambiado mucho, pero sí me di cuenta de lo importante que es ganar una etapa en el Tour de Francia. Con ese maillot belga. Es un nivel completamente distinto, y subestimé lo importante que era”.

Wellens es un corredor con un palmarés amplio, pero quizá nunca había alcanzado tanta popularidad como este verano.

“Volví a casa y tuve la impresión de que todo el mundo me conocía, algo que antes no ocurría”, explica. “Con el maillot de carrera, quiero decir. La gente me para en los entrenamientos para una foto y eso era nuevo. Creo que viene sobre todo del Tour, especialmente entre quienes ven menos ciclismo. Para mí, ha sido una experiencia agradable”.

Wellens es más bien especialista en clásicas quebradas, pero sabe moverse sobre el pavé y su proximidad con Pogacar le asegura presencia el próximo año en Roubaix junto al campeón del mundo. Hace apenas dos semanas, el dúo estuvo entre los cuatro ciclistas que viajaron al norte de Francia para probar material.

“Ya hemos estado probando y fue enormemente instructivo: neumáticos, bicicletas, testamos todo tipo de cosas”, comparte. Es una parte necesaria de la validación del material, clave en una carrera donde las bicis sufren más tensión que quizá en cualquier otra del calendario. “Aprendimos mucho y era necesario hacerlo”.

Y Roubaix es un gran objetivo, quizá el mayor de todos, si se tiene en cuenta que en su debut el año pasado Pogacar fue segundo y la victoria pareció estar al alcance. “Tadej quiere ganar muchas más carreras, pero Roubaix es una de las que está muy arriba en su lista de deseos”, asegura Wellens.