Sabamos que
Movistar Team no está en la mejor forma en esta
Vuelta a España. Dejando a un lado a un
Enric Mas pletórico, el resto de ciclistas se encuentra con problemas. Pese a ello, lo están intentando y en la etapa de Lagos de Covadonga lo dieron todo.
Oier Lazkano, sabiendo que quizás no está para aguantar el ritmo de los mejores de la general cuando la cosa se pone fea, volvió a meterse en la fuga para poder estar con su líder en el último puerto.
Canal y Almeida realizaron el primer esfuerzo,
Nairo Quintana aceleró y
Einer Rubio dio las últimas pedaladas antes de un ataque de Enric Mas a ¡57 kilómetros! de meta que nadie podía haber previsto.
Lo malo es que atacó a lo Enric, mirando hacia atrás y parándose en cuanto vio que Roglic llegaba con cierta facilidad y que O'Connor era ayudado por Paret-Peintre para reincorporarse. Luego llegaba el ataque de Mikel Landa que tampoco hacia daño quizás en unas rampas no tan duras del Collada Llomena y el Decathlon volvía a contar con 3 hombres para el líder en la bajada.
Así, el ataque a priori no sirvió para nada y volvió a formarse un gran pelotón de 130 ciclistas con Movistar otra vez muy bien representado con Enric, Quintana, Rubio, Canal, Oliveira, Lazkano y Arcas.
"Queríamos haber aprovechado para ir adelante, pero no pudo ser. Es una forma de jugar a ganar y de aprovechar al equipo. Enric está bien y así da gusto", comentaba el director deportivo del equipo telefónico Chente García Acosta a TVE justo antes de que se iniciase la subida a Lagos.
Einer Rubio y Oier Lazkano quisieron ponerse a tirar delante del pelotón en la primera parte dura de Lagos, pero Enric Mas no se posicionó tras ellos y se quedaron solos en cabeza de carrera. Mala comunicación. Así, tras este intento de tirar se ponían en cabeza los Soudal para Mikel Landa y Enric se quedaba solo en el grupo de favoritos.
Llegó el ataque de Mikel Landa a unos 8 kilómetros de meta y Enric Mas se quedó completamente parado viendo como Decathlon tiraba para Ben O'Connor. Quería esparar para hacer su ataque.
Justo antes de La Huesera se puso en cabeza del grupo de favoritos Enric Mas con
Primoz Roglic a rueda. El líder iba perdiendo algunos metros ante el ritmo del mallorquín. Dejó completamente reventados a todos y cazó a Landa.
Luego, volvió a atacar y sólo Carapaz pudo pillarle la rueda en un primer momento bajo la lluvia asturiana aunque Primoz conseguía finalmente volver a cazarle. Una pena, lo estaba dando todo Enric.
Una y otra vez lo intentaba Enric Mas, pero sin la explosividad necesaria para dejar a sus rivales. Finalmente acababa entrando en meta junto a Carapaz y Roglic. Se quedaba más cerca de la roja y asegura que seguirá luchando cada día por intentarlo.