Primoz Roglic estuvo a punto de sufrir un desastre en el Monte Bondone cuando se vio incapaz de seguir el ataque de Geraint Thomas y Joao Almeida. Por suerte para el esloveno, todavía tenía a su lado a su fiel gregario en la montaña, Sepp Kuss, que le ayudó a reducir las pérdidas al mínimo. Ahora le toca al
Jumbo-Visma tomar la iniciativa en las cuatro etapas restantes.
"Por fin un día tranquilo para los ciclistas. Nunca es un lujo innecesario en una gran vuelta. Hemos superado bien la etapa", dijo Reef, que recordó brevemente la etapa de montaña del martes al Monte Bondone en la que Roglic fue alcanzado por Thomas y Joao Almeida. "Lo de ayer ha afectado a todo el pelotón".
Las próximas etapas serán de gran importancia para el Jumbo-Visma. "Ya estamos deseando que lleguen los días duros", dice Reef en la página web del equipo. "Somos uno de los pocos equipos que aún están al completo. Eso sin duda jugará a nuestro favor. El INEOS Grenadiers debe controlar el recorrido. Sólo tienen cinco corredores. Quizá podamos aprovechar esa ventaja en una etapa como la de mañana".
Rohan Dennis espera ser de utilidad para Roglic. "Todavía tiene muchas posibilidades de ganar esta carrera. Esperemos que tenga piernas en los próximos días. Los competidores son fuertes. Puede que seamos capaces de jugar inteligentemente y burlarles de esa manera", dice el corredor australiano.