En 2020,
Julian Alaphilippe se fijó en las clásicas adoquinadas, más concretamente en el
Tour de Flandes. Su rendimiento fue muy bueno y el ex campeón del mundo quiere volver a intentarlo en 2023.
En una entrevista con La Montagne, Alaphilippe reveló que en la primavera de la próxima temporada el segundo monumento de la temporada será su prioridad. Alaphilippe debutó en la carrera en 2020, donde estuvo en la escapada ganadora junto a Mathieu van der Poel y Wout van Aert, hasta que un choque contra una moto acabó con sus aspiraciones.
En 2021 acabó lejos del triunfo, mientras su compañero de equipo Kasper Asgreen se hacía con la victoria. En 2022, el francés volvió a centrarse en las clásicas de las Ardenas, pero las enfermedades afectaron a su estado de forma y en la Lieja-Bastoña-Lieja sufrió una caída y graves lesiones que fueron el principio del fin de una temporada para olvidar.
El equipo belga tuvo varios corredores lesionados y enfermos a lo largo de la primavera y no rindió en los adoquines. El año que viene quieren recuperarse para estar en primera línea, y se espera que Alaphilippe vuelva a Flandes a por más.