Mattias Skjelmose ha confirmado este domingo que no es solo una promesa, sino una realidad del pelotón internacional. En una vibrante edición de la
Amstel Gold Race 2025, el joven danés del
Lidl-Trek se impuso con autoridad en un sprint a tres ante Tadej Pogacar y Remco Evenepoel, consolidando su estatus como uno de los grandes nombres del presente y del futuro.
El corredor de 24 años ya había mostrado su confianza antes de la prueba, asegurando que tenía lo necesario para desafiar al campeón del mundo Pogacar. “Siempre es especial competir contra Tadej. Es un rival durísimo, pero confiamos en poder romper su ritmo en algún momento”, declaró Skjelmose a Feltet.dk en la previa. Lo que parecía una declaración ambiciosa terminó siendo una predicción cumplida.
Desde el Lidl-Trek siempre han apostado fuerte por el danés, y su director deportivo, Kim Andersen, no ocultó la emoción tras la carrera. “Es absolutamente fantástico. Es maravilloso. Pero no es una sorpresa”, aseguró a TV2. “Podría haber subido al podio tanto en París-Niza como en la Itzulia. Hace tres días me dijo: ‘Creo que este año lo he conseguido’”.
El momento más crítico de la carrera llegó cuando Pogacar lanzó un ataque en solitario a unos 40 km de la meta. El esloveno parecía encaminado a otra de sus victorias legendarias, pero Skjelmose, lejos de rendirse, se mantuvo firme y fue el primero en lanzar la persecución, seguido por Evenepoel. Juntos, lograron neutralizar al líder del UAE Team Emirates - XRG en la recta final.
“Se suponía que Mattias debía intentar formar un nuevo grupo”, explicó Andersen. “Pero cuando se quedó solo en cabeza, tuvimos momentos de duda sobre si debía seguir a fondo o esperar. Finalmente, decidimos dejarle continuar. Y entonces llegó Remco. Fue una jugada perfecta”.
Y el resto, como suele decirse, ¡es historia!